De forma paralela al acuerdo con la Universidad de Oxford y AstraZeneca para la fabricación de la vacuna contra el covid-19, la Secretaría de Salud (SSA) y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) crearon el Comité Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación de Desarrollo de Vacunas (CNCTI-Vacunas), que incluye la reactivación de Biológicos y Reactivos de México (Birmex).
Si bien ya se garantizaron las primeras dosis en México del preparado que fue anunciado esta semana, este esfuerzo podría dar lugar a nuevos fármacos para diversos padecimientos y de creación 100 por ciento nacional.
“Se está articulando una hoja de ruta, un plan estratégico a corto, mediano y largo plazos para atender esta necesidad estratégica de seguridad nacional. De no solamente probar vacunas o de adquirir las que son urgentes, como lo es la del covid-19, sino también investigar para el desarrollo de vacunas propias”, dijo María Elena Álvarez-Buylla, directora del Conacyt al diario Milenio.
Durante un seminario digital organizado por el Conacyt, Arturo Reyes Sandoval, investigador de la Universidad de Oxford, afirmó que México debe asegurarse de contar con vacunas con prontitud, aunque a largo plazo será importante desarrollar sus propios fármacos.
“México ha sido caracterizado, desde hace muchos años, por producir y exportar. Ahora se puede recrear ese ambiente para tener esa cobertura para nuestra población, pero además venderlas a otros países”, dijo.