Hashem Abedi, hermano de Salman Abedi, el autor del atentado suicida de mayo de 2017 en Manchester en el que murieron 22 personas, fue condenado este jueves por un tribunal británico a 55 años de cárcel por su participación en ese ataque.
El 22 de mayo de 2017, tras un concierto de la cantante estadounidense Ariana Grande en la ciudad inglesa de Manchester, Salman Abedi cometió un atentado suicida en el que fallecieron 22 personas, 7 de ellas niños, y otras 512 resultaron heridas.
Tras el suceso, Hashem Abedi, de 23 años, fue apresado en Libia y el Reino Unido pidió su extradición por su posible implicación en los hechos, un proceso que ha terminado con la condena de hoy.
Al dar a conocer hoy su dictamen en el tribunal penal de Old Bailey, en el centro de Londres, el juez Jeremy Baker consideró que Hashem Abedi y su hermano fueron «culpables por igual por las muertes y heridas causadas por esa explosión».
«La realidad es que estos fueron delitos atroces, de alto nivel, mortíferos en su intención y con espantosas consecuencias», añadió.
El magistrado subrayó que, si bien Salman Abedi fue «directamente responsable» del ataque, «quedó claro que este acusado tuvo una participación integral en la planificación» y agregó que el motivo fue impulsar la «ideología del islamismo».
Tras el dictamen, el primer ministro británico, Boris Johnson, dijo que la condena representa una «oportunidad para reflexionar sobre la importancia de la tolerancia, la comunidad y la bondad».
«El ataque contra el (centro de espectáculos) Manchester Arena fue un acto de violencia horrible y cobarde que tenía como blanco a niños y familias», señaló Johnson en una declaración.
Johnson resaltó que las víctimas «nunca serán olvidadas», «ni tampoco el espíritu del pueblo de Manchester que se unió para enviar una señal clara al mundo de que los terroristas nunca prevalecerán».
«Mis pensamientos -puntualizó- están con los que sobrevivieron, y con los amigos y familias de las víctimas».
Abedi, con domicilio en Manchester, había sido declarado culpable el pasado marzo en el tribunal de Old Bailey por la muerte de 22 personas, intento de asesinato y complot para provocar una explosión capaz de poner en peligro vidas humanas.
Antes de la planificación del atentado, Abadi había abandonado el Reino Unido en 2017 para trasladarse a Libia junto con su hermano Salman, antes de que este último regresara solo a Inglaterra y perpetrase el ataque.