El presidente Andrés López aseguró que ya comenzó la “segunda etapa” de la apodada cuarta transformación; es decir, terminar las obras comprometidas para que al final de su mandato no herede ninguna sin terminar a los futuros gobiernos.
Durante su gira por el estado de Sinaloa, donde visitó la presa Picachos López repitió que en los dos primeros años de su gobierno ya se logró sentar las bases de la transformación.
Acompañado por su esposa Beatriz Gutiérrez; del gobernador Quirino Ordaz; y de la titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Blanca Jiménez, López dijo que en este nuevo periodo se le dará continuidad a lo iniciado y se terminarán las obras de cara al periodo 2022-2024.
“Viene la segunda etapa, pues es darle continuidad a lo que ya iniciamos y terminar obras que se puedan concluir en los siguientes dos años o a finales de 2024, y ya no estarnos comprometiendo más de lo que se va poder cumplir porque no queremos dejar obras en proceso”, comentó.
Lo anterior, porque el mandatario ha alegado que su gobierno ha recibido obras inconclusas, como hospitales, escuelas, caminos, presas y trenes.
López insistió en que su gobierno ha dado resultados en medio de la crisis económica por la pandemia.
Temas hidráulicos
A los habitantes de Concordia, López prometió que tendrán agua, pues consideró paradójico que haya una presa pero no acceso al vital líquido.
“Hago el compromiso que en Concordia se haga un acueducto y la gente tenga agua”, expresó.
Posteriormente, en La Escondida, Mazatlán, López que se buscará retirar la planta de tratamiento de aguas negras del municipio para que el espacio sea destinado al desarrollo turístico «y para la recreación del pueblo”.
Durante su visita de supervisión a la obra de la Potabilizadora Acueducto Miravalles, en la misma localidad, el mandatario explicó que el proyecto en la planta de aguas negras se realizará con inversión federal, estatal y municipal, en una iniciativa respaldada por el gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz Copel.
