El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar, señaló este jueves que «alguien tendrá que pagar» los 60 mil millones de pesos que, a su parecer, costará la reforma eléctrica del presidente Andrés López.
«Hemos argumentado que esos 60 mil 000 millones de pesos adicionales que costará esta nueva forma de despacho de la electricidad en México, alguien los tendrá que pagar y ese alguien será o los recursos fiscales o los costos implícitos en la producción de bienes y servicios del país«, dijo Salazar.
La cúpula empresarial organizó un foro virtual de dos días, el cual cerró este jueves con diversas mesas de análisis sobre la reforma eléctrica aprobada ya en el Congreso que prioriza la electricidad de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por delante de los generadores privados de energías renovables.
«Ante esta iniciativa nuestro comentario y crítica es que es evidente que no han sido los criterios técnicos los que la han motivado, los criterios económicos no han sido el soporte y los costos son clarísimos«, añadió.
El martes, con 68 votos a favor y 58 en contra, el Senado mexicano ratificó en fast track la reforma enviada por López, la cual ya había sido aprobada la semana anterior por la Cámara de Diputados.
El bloque del Partido Morena usó su mayoría para aprobar la reforma en menos de un mes y vetó la comparecencia en el Senado de expertos y empresas para debatirla.
Salazar consideró que el Congreso mexicano «es un parlamento y ese parlamento debió permitir que todos expusiéramos nuestros puntos de vista» para que «verdaderamente se mostrara la facultad que tiene el Poder Legislativo de representarnos a todos los mexicanos, no solamente a una orientación política«.
La reforma establece despachar primero la electricidad de las plantas hidroeléctricas y de combustibles fósiles de la CFE, sobre las centrales privadas de renovables y al final las de ciclo combinado.
También, de forma retroactiva, ordena revisar los contratos previos del Gobierno con particulares y cambia las reglas de los Certificados de Energía Limpia (CEL) para darlos a plantas viejas de la CFE.
Salazar auguró el miércoles que un aumento en los costos de la electricidad en fábricas y empresas, lo acabarán pagando los mexicanos cuando consuman bienes o servicios.
López declaró el miércoles que «no quiere expropiar por expropiar» ni generar miedo a los inversionistas, sino corregir los contratos «leoninos» que obtuvieron algunas empresas durante los “gobiernos anteriores”.