La Cámara de Diputados aprobó en lo general con 316 votos a favor, 129 en contra y 23 abstenciones el proyecto de decreto por el que se expide la Ley Federal para la Regulación del Cannabis o marihuana, y que reforma y adiciona diversas disposiciones de la Ley General de Salud y del Código Penal Federal.

El objeto de esta legislación es la regulación de la producción y comercialización de la marihuana y sus derivados, bajo el enfoque de libre desarrollo de la personalidad, salud pública y respeto a los derechos humanos.

En el proyecto, se prevé legalizar el uso lúdico de la marihuana y despenalizar la posesión de hasta 28 gramos para consumo personal, además de autorizar el cultivo de hasta seis plantas para autoconsumo o hasta ocho en caso de que en la vivienda resida más de un consumidor.

Asimismo, da marcha atrás a la creación del Instituto Mexicano de la Cannabis y dejar al Consejo Nacional contra las Adicciones (Conadic) como órgano rector de la cadena productiva y consumo de marihuana.

Entre las nuevas facultades del Conadic estaría la de autorizar y revocar las licencias de producción, distribución, comercialización y venta final de la mariguana, e incluso la de limitar o prohibir la adquisición, posesión y consumo de cannabis psicoactivo a personas mayores de 18 años y menores de 25 como medida de protección a su salud.

El ordenamiento considera también la posibilidad de constituir asociaciones de cannabis para cultivar y poseer hasta cuatro plantas por socio, sin exceder de 50 en total, para consumo con fines lúdicos.

El nuevo ordenamiento prohíbe el consumo de cannabis y sus derivados por personas menores de 18 años, así como en áreas de trabajo o instalaciones escolares públicas o privadas, cualquiera que sea el nivel educativo.

Dentro de las modificaciones al Código Penal Federal son para regular las conductas punibles relacionadas con la marihiuana. Entre las que se establece que a quien produzca, transporte, trafique, comercie o suministre sin la autorización a que se refieren la Ley General de Salud o la Ley Federal para la Regulación del Cannabis, se impondrá una pena de cinco a quince años, siempre que la cantidad sea superior a cinco kilos seiscientos gramos.

Al fundamentar el dictamen, la presidenta de la Comisión de Salud en San Lázaro, Carmen Medel Palma, resaltó la necesidad de establecer un nuevo paradigma en la política de drogas que hasta el día de hoy se ha basado fundamentalmente en una visión prohibicionista, misma que ha quedado demostrado “ha sido un rotundo fracaso”.

Por el contrario, señaló, que derivado de la prohibición se ha generado un aumento en los problemas de salud pública y altos índices de violencia y criminalidad que han significado un alto número de vidas humanas.

No podemos cerrar los ojos ante esta realidad. En nuestro territorio han tenido lugar más muertes por la lucha contra el narcotráfico que a causa del consumo problemático de drogas, que ha fomentado un comercio ilegal. Se ha empoderado a la delincuencia organizada y arrastrado a diversos sectores de campesinos y comunidades marginadas a optar a emplearse en actividades productivas y laborales ilícitas”, agregó.

Indicó que se ha apartado a sectores productivos de la oportunidad de incorporarse al sistema económico que coadyuve al desarrollo sostenible del país; no ha permitido una justa distribución tributaria y tampoco ha fomentado la paz ni la seguridad.

Por el PAN, Éctor Jaime Ramírez Barba, consideró que con la legislación se dañará la salud humana, la convivencia social y el porvenir de muchas niñas, niños, adolescentes, sus familias y en suma todo nuestro país.

Con esta Ley se pretende hacer de México un país productor de drogas y la tendencia está a la vista, pues al saberse que aprobaríamos en el Pleno esta legislación para liberar la cannabis el presidente López Obrador se apresuró a decir que ahora sigue legalizar el cultivo de la amapola”, señaló.

Respecto al argumento de Morena de que al aprobar esta ley se disminuirá la violencia, aseguró que los problemas originados por la producción, venta, consumo de cocaína heroína, metanfetaminas, fentanilo, y muertes asociadas continuarán porque es un fenómeno multifactorial.

La diputada federal del PRI, Cynthia Iliana López Castro, refirió que el dictamen abre la puerta a una regulación apresurada y caótica de actividades como la producción, distribución y comercialización recreativa.

Indicó que no se establecen límites al porcentaje de Tetrahidrocannabinol (THC) a productos para consumo recreativo.

Alertó que un panque de chocolate con concentrado de marihuana puede tener el efecto de fumar 78 churros en un solo consumo.

La marihuana no es una droga inofensiva como se nos ha hecho creer, tiene efectos permanentes sobre las capacidades cognitivas y sociales de los jóvenes. Aumenta el riesgo y frecuentemente es una puerta de consumo a otras sustancias”, indicó.

La diputada del Grupo Parlamentario del PES, Adriana Paulina Teissier Zavala, señaló que la regulación del uso del cannabis y sus derivados, lejos de beneficiar a las personas consumidoras, potencializará los riesgos sociales

Subrayó que la aprobación de este dictamen tiene implicaciones que van más allá de lo que pareciera la solución a los problemas de delincuencia y bajo el enfoque de salud pública, derechos humanos y desarrollo sostenible es un tema de gran relevancia.

Insistió en que con esta reforma se abrirán las puertas para que otro tipo de drogas más dañinas circulen entre la población más indefensa.

La diputada sin partido, Ana Lucia Riojas Martínez, consideró que esta reforma no es suficiente para que se deje de perseguir a quienes han decidido ser consumidores.

No queremos más represión en contra del libre desarrollo de la personalidad, ni más limitaciones sobre las decisiones de nuestro cuerpo”, dijo.