Todos los pasajeros del avión declarado como desaparecido hoy en la región de Tomsk, en Siberia, Rusia, fueron hallados con vida junto a la aeronave, que tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia.

«Todos los miembros de la tripulación y los pasajeros están vivos«, declaró a Interfax un representante de la aerolínea Aviación Ligera de Siberia (SILA), a la que pertenece la aeronave averiada.

Anteriormente, medios de prensa rusos informaron sobre la desaparición de un avión Antonov An-28 con 17 personas a bordo. Después, el Ministerio de Emergencias de Rusia puntualizó que en la aeronave había 19 personas.

El bimotor turbohélice ligero había partido de la ciudad de Kedrovi a Tomsk, centro administrativo de la región homónima, y la tripulación no informó de ningún problema a bordo.

El servicio de prensa del Ministerio de Emergencias de Rusia informó de que había sido hallado el sitio del aterrizaje de emergencia y que junto a la aeronave había personas vivas.

Una fuente declaró a Interfax que «según datos preliminares, uno de los motores falló a la media hora de vuelo. Los pilotos advirtieron a los pasajeros de que efectuarían un aterrizaje forzoso y lograron posar el avión de panza«.

Las salidas de emergencia no sufrieron daños durante el aterrizaje y los pasajeros lograron abandonar la aeronave sin problemas.

La operación de rescate, en la que participan dos helicópteros Mi-8 y uno del Ministerio de Emergencias de Rusia, es dirigida por el gobernador de la región de Tomsk, Serguéi Zhvachkin.

Según la misma agencia, el avión, de 1989, fue operado primero por Aeroflot y posteriormente, antes de estar en un hangar entre 2003 y 2007, por aerolíneas kirguisas, para ser incorporado en 2014 al parque de SILA.