El subcomandante Galeano, líder político militar del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), expresó este lunes que Chiapas se encuentra «al borde de la guerra civil» y que “el desgobierno de Rutilio Escandón está haciendo todo lo posible porque se desestabilice, el estado de Chiapas”.

El grupo armado dio a conocer esta tarde la libertad de los dos indígenas zapatistas plagiados por miembros de la Organización Regional de Cafeticultores de Ocosingo (Orcao), un grupo de corte paramilitar, según el EZLN, y que es auspiciado o patrocinado –acusa- por el gobierno de Escandón Cadenas.

Dijeron que la liberación de estos dos miembros de la Junta de Buen Gobierno Patria Nueva, ubicada en Ocosingo, fue gracias a los defensores de derechos humanos y párrocos de Oxchuc y San Cristóbal de Las Casas, quienes intervinieron de forma decidida, aún contra los intentos de obstaculizar y sabotearla por parte de funcionarios de la Secretaría General de Gobierno.

En su comunicado intitulado «Chiapas, al borde de la guerra civil«, Galeano dijo que el pasado 11 de septiembre mientras una delegación zapatista que salió de Chiapas se encontraba en la Ciudad de México, “miembros de ORCAO, organización paramilitar al servicio del gobierno del estado de Chiapas, secuestraron a Sebastián Núñez Pérez y José Antonio Sánchez Juárez”, autoridades autónomas de la Junta de Buen Gobierno de Patria Nueva.

La ORCAO “es una organización político-militar de corte paramilitar, tiene uniformes, equipos, armas y parque obtenidos con el dinero que reciben de los programas sociales”, afirmó.

«Se quedan con una parte y la otra la dan a los funcionarios para que publiquen que se está cumpliendo con el asistencialismo, con esas armas disparan todas las noches contra la comunidad zapatista de Moisés Gandhi”, de acuerdo con Galeano.

El EZLN aguantó con paciencia hasta agotar los canales posibles para la solución.  Mientras el gobierno del estado de Chiapas saboteaba y estorbaba la liberación, fueron organizaciones defensoras de los derechos humanos y la iglesia católica progresista quienes valoraron con justeza lo que podría ocurrir”, dijo el vocero.

Mencionó que los dos zapatistas estuvieron privados de su libertad durante ocho días y que fueron liberados, «gracias a la intervención de los párrocos de San Cristóbal de Las Casas y de Oxchuc, pertenecientes a la Diócesis de San Cristóbal.

Aclaró que “si el conflicto no escaló hasta llegar a una tragedia, fue por la intervención de los párrocos mencionados, las organizaciones defensoras de los derechos humanos y las movilizaciones y denuncias que en México y, sobre todo, en Europa, se realizaron”.

Por ello, Galeano llamó a grupos solidarios con el EZLN a manifestarse frente a las embajadas y consulados de México y en las casas del gobierno del estado de Chiapas, «para exigirles que se dejen ya de provocaciones y abandonen el culto a la muerte que profesan«, para lo cual propuso como fecha el viernes 24 de septiembre de este 2021.

Con información de Proceso