Con los Juegos Olímpicos de París a punto de comenzar este viernes, la participación de la delegación israelí ha desencadenado una intensa controversia política y preocupaciones por la seguridad, destacadas por pronunciamientos contradictorios y llamados a protestas.
El Ministro del Interior de Francia, Gérald Darmanin, aseguró en una entrevista televisiva el domingo que los atletas israelíes recibirán protección las 24 horas del día durante los Juegos Olímpicos, subrayando la sensibilidad histórica tras la masacre de los Juegos Olímpicos de Múnich en 1972, donde 11 atletas israelíes fueron asesinados por militantes palestinos.
La situación se intensificó después de que el legislador del partido de extrema izquierda Francia Insumisa (LFI), Thomas Portes, declarara públicamente que los atletas olímpicos de Israel no eran bienvenidos en Francia y alentara a manifestaciones en su contra. Imágenes difundidas en redes sociales captaron a Portes afirmando: «La delegación israelí no es bienvenida en París. Los atletas israelíes no son bienvenidos en los Juegos Olímpicos de París».
Te puede interesar: Sindicato de aeropuertos en París amenaza con huelga previo a los Juegos Olímpicos
En contraste, el Ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Stephane Sejourne, expresó en una reunión en Bruselas con funcionarios de la Unión Europea que Francia da la bienvenida a la delegación israelí para los Juegos Olímpicos, destacando que se garantizará la seguridad de los atletas israelíes.
La postura francesa ha reflejado una división interna marcada, con críticos de la política de Israel en Gaza acusando a miembros pro palestinos de antisemitismo, mientras que las autoridades francesas buscan equilibrar la seguridad con el respeto por la diversidad de opiniones.
Paul Benvie, funcionario del Departamento de Estado de EE. UU. encargado de la seguridad olímpica para el equipo estadounidense, comentó a Reuters que el sentimiento antiisraelí era uno de varios problemas que estaban siendo analizados, como parte de una evaluación continua para ajustar las estrategias de seguridad.
Hasta el momento, Thomas Portes no ha respondido a las solicitudes de comentarios de Reuters, y la embajada de Israel optó por no hacer declaraciones al respecto.
Las tensiones geopolíticas y las sensibilidades históricas continúan perfilando el ambiente previo a los Juegos Olímpicos de París, donde el deporte enfrenta una vez más los desafíos de la política internacional.