Beirut, 6 nov (EFE).- El nuevo líder del grupo chií libanés Hizbulá, Naim Qasem, aseguró este miércoles que la victoria de Donald Trump o de Kamala Harris es irrelevante para el desarrollo de la guerra con Israel, ya que acusó a EEUU de brindar «apoyo ilimitado» al Estado judío tanto en el Líbano como en la Franja de Gaza.

«Nos da igual que gane Harris o Trump porque no dependeremos de los movimientos que haya en la política, pero sí dependemos de lo que ocurra en el terreno», dijo Qasem en un discurso televisado, en el que acusó a EE.UU. de ser «el gran diablo», pero no se pronunció explícitamente sobre la victoria del republicano.

Oriente Medio ha estado aguantando el aliento en las últimas semanas a la espera de los resultados de las elecciones de Estados Unidos y el efecto que tengan en los desarrollos de las guerras en el Líbano y en la Franja de Gaza.

«Los israelíes tienen tres puntos fuertes: el genocidio, matar a civiles y su brutalidad; su capacidad aérea con apoyo ilimitado de EE.UU., el gran diablo; y haber desplegado cinco divisiones en la frontera», dijo Qasem, en referencia a la invasión terrestre que el Ejército israelí lleva a cabo desde el 1 de octubre.

Respecto a los desarrollos sobre el terreno, el nuevo jefe de Hizbulá aseguró que los soldados de Israel «están parados en la frontera con miedo a enfrentarse», pese a que en el último mes se han producido intensos choques entre las partes en decenas de aldeas fronterizas a lo largo del sur del Líbano.

Más de 3.000 personas han muerto y otros 1,2 millones se han visto desplazadas solo en el Líbano desde el inicio de los choques entre Israel y Hizbulá el 8 de octubre de 2023, un día después del estallido de la guerra en la Franja de Gaza.

Se estima que alrededor de 2.000 personas han muerto solo desde el 23 de septiembre, cuando el Ejército israelí lanzó una campaña de bombardeos masiva contra diferentes puntos del Líbano y, una semana después, inició la invasión terrestre.