A partir del 1 de diciembre, se concreta la separación entre el conglomerado estadounidense Citi y el banco minorista Banamex, dando origen a dos grupos financieros independientes en México: Grupo Financiero Citi México y Grupo Financiero Banamex.
Citi continuará su enfoque en la banca corporativa e institucional, mientras que Banamex se concentrará en la banca de consumo, atendiendo a clientes en áreas como cuentas transaccionales, créditos personales, hipotecas y más. Esta división es el resultado de un proceso de desinversión que Citigroup anunció casi tres años atrás, como parte de su estrategia para enfocarse en el negocio de banca corporativa a nivel global.
El proceso de separación es una etapa clave en la ejecución del plan estratégico de simplificación de Citi. La firma ha señalado que la próxima fase será la Oferta Pública Inicial (OPI) de Banamex, que se llevará a cabo en la Bolsa Mexicana de Valores en 2025, una vez que se obtengan las aprobaciones regulatorias necesarias y se valoren las condiciones del mercado.
Jane Fraser, directora ejecutiva de Citi, destacó que la escisión se realizó con total transparencia y enfatizó que el grupo continuará conectando a México con el resto del mundo a través de sus plataformas para inversionistas y clientes corporativos. Además, aseguró que se trabaja en la optimización del valor para los accionistas en la preparación para la OPI de Banamex.
En términos de operaciones, Grupo Financiero Citi México mantendrá una presencia significativa en el país, con una cartera de aproximadamente 3,000 clientes corporativos y 4,000 empleados. Citi México operará sin sucursales físicas, y los clientes corporativos comenzarán a realizar el cambio de cuentas CLABE, mientras que los clientes de Banamex no tendrán que realizar modificaciones en sus tarjetas, aplicaciones o números de cuenta.
Por su parte, Banamex, con alrededor de 39,000 empleados, seguirá brindando servicios a sus clientes de banca de consumo a través de su red de sucursales, BancaNet y Citibanamex Móvil, además de continuar con sus operaciones en el sector de fondos de inversión y seguros.
La venta de Banamex, aunque ha sido un proceso largo y complicado, culminará con la oferta pública en 2025, en un movimiento que marcará el futuro del banco y su impacto en el mercado mexicano.