La Embajada de México en los Emiratos Árabes Unidos conmemoró el Grito de Independencia con una cena mexicana muy especial: cocineras tradicionales de la región Mixteca de Oaxaca viajaron a Abu Dabi para ofrecer una muestra gastronómica representativa de su tierra.

La celebración, organizada por el embajador Luis Alfonso de Alba, reunió a cientos de connacionales y representantes diplomáticos para compartir sabores, música y tradiciones en una noche que cruzó fronteras.

Tradición que viaja en canastas

Las cocineras oaxaqueñas —Doña Olga, Doña Vicky, Doña Marisela (de Tlaxiaco) y Doña Mayra (de Huajuapan)— emprendieron el viaje con una misión clara: llevar el sabor de Oaxaca hasta Medio Oriente. El trayecto fue toda una experiencia, especialmente por la forma en que transportaron los ingredientes: en grandes canastas de palma.

Estas canastas contenían los productos esenciales para preparar platillos típicos, como mole negro, tlayudas, tamales de chepil y tortillas hechas al comal. Su presencia causó curiosidad en aeropuertos y vuelos, destacando la dedicación de las cocineras por conservar la autenticidad de su cocina.

Menú oaxaqueño para mil comensales

En Abu Dabi, las cocineras ofrecieron un banquete con ingredientes ancestrales: maíz nativo, chile costeño, cacao y hierbas de la Mixteca. Cerca de mil personas disfrutaron de este festín que incluyó también caldo de piedra y diversos antojitos mexicanos.

La cena fue solo el inicio de una noche festiva. Música tradicional, bailes y zapateado acompañaron el evento, generando un ambiente de nostalgia, orgullo e identidad para la comunidad mexicana en los Emiratos Árabes.

Una experiencia que fortalece raíces

Más allá del acto protocolario, el evento permitió a las y los asistentes reconectar con sus raíces a través de la comida. Para las cocineras, fue una oportunidad única de representar a sus pueblos y de mostrar al mundo la riqueza culinaria de Oaxaca.

El embajador de México destacó que este tipo de eventos promueven la cultura nacional en el extranjero y fortalecen el sentido de comunidad entre mexicanos que viven lejos de su país.