La industria cárnica mexicana anunció su intención de abrir nuevos mercados de exportación, tras el cierre de la frontera con Estados Unidos por el resurgimiento del gusano barrenador del ganado. La plaga ha provocado pérdidas superiores a los 11 millones de dólares diarios, afectando gravemente a productores y exportadores.
Alonso Fernández Flores, presidente de la Asociación Nacional de Establecimientos Tipo Inspección Federal (ANETIF), calificó el brote como una “preocupación latente” que ha impactado la exportación de ganado bovino en pie. Ante este panorama, destacó la necesidad de fortalecer la industria y diversificar destinos comerciales.
Fernández señaló que, pese a los desafíos, la industria cárnica mexicana se mantiene firme y con perspectivas positivas. El Sistema Tipo Inspección Federal (TIF) ha sido clave para incrementar la presencia de productos cárnicos en el extranjero, con nuevos mercados como Filipinas en la mira.
Además, se busca reactivar acuerdos comerciales con Europa y atender la demanda en países asiáticos. El dirigente subrayó que el sector aporta el 2.3 % al PIB nacional y crece por encima del promedio alimentario, impulsado por el consumo interno.
Respecto a la próxima revisión del tratado comercial T-MEC, Alonso Fernández expresó confianza en que se mantendrán condiciones favorables para México como socio estratégico. Esto permitiría continuar con el posicionamiento de productos cárnicos en Estados Unidos y Canadá.
Actualmente, México exporta más de 276 mil toneladas anuales de carne de res y cerdo, siendo estos los productos más atractivos para los mercados internacionales. La séptima Cumbre de la Industria Alimentaria TIF, a celebrarse del 12 al 14 de noviembre en Puerto Vallarta, será clave para definir estrategias ante este contexto.