El concurso de belleza Miss Universo esta envuelto en una grave crisis legal tras su edición celebrada en Bangkok, luego de que se acumularon demandas por fraude, difamación y presuntos vínculos con el crimen organizado. La polémica se intensificó tras la coronación de la mexicana Fátima Bosch el 21 de noviembre, un resultado que desató acusaciones sobre irregularidades en el proceso de selección.

En Tailandia, se inició un proceso judicial por difamación contra Bosch, presentado por Nawat Itsaragrisil, director nacional del certamen en ese país. Paralelamente, se giró una orden de arresto contra Jakkaphong “Anne” Jakrajutatip, copropietaria de Miss Universo, acusada de fraude financiero y actualmente prófuga de la justicia. La empresaria fue señalada por falsear información económica dentro de su conglomerado JKN Global Group, situación que derivó en la expulsión de la firma de la Bolsa de Valores de Tailandia.

La crisis también se trasladó a México, donde un juez emitió una orden de captura contra Raúl Rocha Cantú, presidente del certamen y accionista mayoritario, por presuntos vínculos con delincuencia organizada. La Fiscalía mexicana lo declaró prófugo tras incumplir citatorios judiciales.

Este cúmulo de escándalos dañó severamente la imagen de Miss Universo, que además enfrentó la renuncia de su director ejecutivo y el cierre de oficinas en México, dejando al certamen en una profunda etapa de incertidumbre institucional.