El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció el viernes un aumento de 3 mil 300 por ciento al salario mínimo, el quinto incremento en lo que va del año, en un intento por aminorar el impacto de la hiperinflación que golpea al país.
Como parte de un paquete de medidas, Maduro adelantó que su gobierno va a establecer “un solo de tipo de cambio fluctuante” que estará anclado al petro, la criptomoneda venezolana, pero no precisó cuándo entraría en vigencia. En el país sudamericano operan dos tasas: una para las subastas de divisas oficiales y otra para las remesas que están por debajo del tipo de cambio del mercado negro.
Maduro indicó que el salario mínimo será de mil 800 bolívares soberanos, la nueva moneda que estará en vigencia a partir del lunes, y precisó que ese nuevo ingreso equivaldrá a medio petro. El gobernante también fijó las pensiones en mil 800 bolívares soberanos.
El mandatario ya había aumentado los salarios en junio, cuando aprobó un ajuste de 103 por ciento que llevó el sueldo mínimo a 5.19 millones de bolívares (equivalentes a 51.9 bolívares soberanos).
Maduro dijo que, para evitar que la medida tenga incidencia sobre la inflación, durante los próximos 90 días el gobierno asumirá el “diferencial de la nómina salarial de toda la pequeña y la mediana industria del país”.
El anuncio del aumento en los sueldos llega a tres días de que entre en vigencia una reconversión monetaria que implicará la eliminación de cinco ceros al bolívar. El cambio monetario se enmarca en un plan de ajuste que el gobierno espera desarrollar en las próximas semanas para sacar al país petrolero de la compleja crisis económica y social que enfrenta.
El gobernante expresó que se entregará un “bono reconversión” de 600 bolívares soberanos a 10 millones de personas que poseen el carné estatal conocido como el “carnet de la patria”.
El nuevo aumento salarial fue cuestionado por analistas y empresarios, que advirtieron que la medida podría llevar a una fuerte aceleración de los precios, y representará un duro golpe para muchas empresas agobiadas por la hiperinflación y la severa recesión económica.
“Esto tiene un costo fiscal importante y una carga fuerte sobre el sector privado”, afirmó en su cuenta de Twitter el economista Asdrúbal Oliveros, director de la firma local de análisis Ecoanalítica. Sostuvo que ante la expansión monetaria que generará el aumento salarial y nuevo bono “se espera una etapa mucho más agresiva de la hiperinflación”.
En julio se reportó en Venezuela una inflación anualizada de 82 mil 766 por ciento, de acuerdo con cálculos de los congresistas opositores.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) indicó que la inflación podría saltar en Venezuela a un millón por ciento al cierre del año, una tasa récord en la región que llevaría el país petrolero a una situación similar a la que enfrentaron Alemania en 1923 y Zimbabue en 2008.
El gobernante reiteró que el petro funcionará a partir del lunes como “unidad de cuenta venezolana” y servirá para fijar el “valor del trabajo y el precio de los bienes de consumo”.
Al hablar sobre el precio de la criptomoneda, Maduro dijo que un petro tendrá un valor en dólares equivalente a un “monto oscilante de 60 dólares o más”, que es el precio del barril petrolero, y agregó que cada petro valdrá “3 mil 600 bolívares (soberanos)”.
“Este jueguito se agotó, el jueguito perverso, criminal, de establecer un precio especulativo y falso del dólar y después dolarizar todos los precios”, señaló Maduro, al asegurar que aspira a que con el anclaje del bolívar soberano al petro y la fijación de una nueva tasa se logre derrotar al mercado negro, donde el tipo de cambio se cotiza a más de quince veces la tasa oficial.
En Venezuela está vigente desde hace quince años un control de cambio que se flexibilizó recientemente con la derogación de una legislación sobre ilícitos cambiarios.
El tipo de cambio del mercado negro, que en la actualidad está alrededor de 6 millones de bolívares por dólar, es utilizado como referencia para la definición de gran parte de los precios en Venezuela.
El mandatario no dejó claro si el valor del petro respecto al dólar y el bolívar soberano será utilizado como referencia para las subastas de divisas oficiales del Sistema de Divisas de Tipo de Cambio Complementario Flotante de Mercado (Dicom), o para las operaciones de las remesas que tienen una tasa diferente a la de las subastas.
Asimismo, se anunció que se llevará el Impuesto Al Valor Agregado (IVA) de 12 a 16 por ciento.