En el juicio político a Donald Trump, tiene la palabra la defensa, la que argumentará frente al Senado de mayoría republicana que debe absolver al presidente de los cargos de abuso de poder y obstrucción del Congreso.

Se prevé que los defensores, al presentar sus alegatos el sábado, argumentarán que no cometió falta alguna cuando pidió al presidente de Ucrania que investigue a un rival político de Trump, el exvicepresidente Joe Biden, quien aspira a la candidatura presidencial demócrata para la elección de 2020.

El equipo legal de Trump ha anticipado una defensa agresiva que promoverá una visión amplia del poder presidencial. Presentarán a un Trump acosado por opositores políticos empeñados en revertir los resultados de la elección de 2016 y asegurar su derrota en noviembre.

También quieren poner a Biden a la defensiva en su campaña para ganar las asambleas partidarias de Iowa en febrero, las que dan inicio a las elecciones primarias.

“Presentaron su caso. Ahora nos toca a nosotros”, dijo Jay Sekulow, uno de los defensores.

La presentación de los cargos por legisladores demócratas se desarrolló a lo largo de tres días. En su resumen final el viernes, dijeron que Trump seguirá abusando de su poder y poniendo en peligro la democracia estadounidense si el Congreso no lo destituye. Imploraron a los republicanos que permitan la presentación de nuevas pruebas antes de que los senadores den su veredicto.

“Denle a Estados Unidos un juicio justo”, dijo el representante demócrata Adam Schiff, quien tuvo el papel de fiscal principal. “Se lo merece”.

Schiff concluyó con argumentos metódicos y apasionados para demostrar que Trump abusó de su poder al pedir al presidente de Ucrania que investigue a sus rivales políticos y luego obstruyó la investigación del Congreso. Los abogados de Trump sostienen que ejerció sus derechos como presidente al pedir la investigación.

Los fiscales de la cámara baja desfilaron por el Capitolio para entregar al Senado las 28.578 fojas de su presentación.

Los siete fiscales demócratas acompañaron sus argumentos con videoclips, mensajes electrónicos y lecciones de historia. Los republicanos que consideraron la presentación tediosa y redundante pueden esperar otro tono y estilo de parte de los defensores, que planean atacar los cargos desde el ángulo político además del jurídico.

“Lo que quieren es impedir que el presidente se presente a reelección en 2020”, dijo Sekulow. “No confían en que el pueblo estadounidense pueda tomar esa decisión”.