La policía de Alemania detuvo a Yves Rausch, un fugitivo que, al más puro estilo de la película Rambo, armado y con ropa de combate, se escondió en la Selva Negra tras desarmar con éxito a cuatro policías.

“Luego de varios días de buscar a Yves Rausch, quien se había introducido en la Selva cerca de Oppenau, la policía logró realizar un arresto provisional”, indicó la institución en un comunicado.

El operativo para la detención de Rausch, quien se había escondido desde el domingo, requirió la participación de 200 agentes, helicópteros, cámaras térmicas y perros.

Al fugitivo se le incautaron cuatro armas de fuego, aunque fue fotografiado también con un arco, flechas y un cuchillo, lo que le asemejaba más con el propio personaje de Rambo.

Desde el lunes, la policía de Oppenau, en estado federado de Baden-Wurtemberg, había pedido a la población quedarse en casa y no detenerse en su automóvil, por el temor de un posible ataque o secuestro por parte de Rausch para escapar.

Todo se originó el domingo, cuando una patrulla intentó desalojar a Yves de la choza donde se encontraba; cuando parecía cooperar sin resistencia, sorpresivamente sacó un arma y amenazó a los agentes, a los cuales consiguió sustraer sus armas de servicio, con las que se adentró en la selva.

Pese a los cargos que se le imputan, la madre de Rausch lo defendió, diciendo que es no es una “persona violenta” y que vivía como si de un guardabosques se tratase, con la intención de salir a la naturaleza y ser libre, comiendo de su propia cosecha y tallando figuras de madera para vender.

Increíblemente el hecho generó burlas en Alemania, donde usuarios de redes sociales, le han creado incluso grupos de fans.

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