Autoridades de Noruega revisan protocolos sobre quién puede recibir la vacuna contra el covid-19 tras la muerte de al menos 23 adultos mayores tras ser inoculados.

Desde ahora serán los médicos quienes decidan si una persona recibe o no la vacuna.

La Agencia Noruega de Medicamentos informó que, de 29 personas que sufrieron efectos secundarios tras ser vacunadas, 13 murieron en hogares para ancianos. Todos los casos de decesos corresponden a mayores de 80 años.

Además, la cifra se elevó este lunes a 23 y, de acuerdo con la agencia Bloomberg, serían hasta 29 los fallecidos.

Reacciones comunes a las vacunas con ARNm, como fiebre y náuseas, pueden haber contribuido a un desenlace fatal en algunos pacientes frágiles y ancianos”, señaló la mencionada agencia, según el diario El Universal.

El regulador de medicamentos en el país nórdico advirtió que las personas mayores de 80 años y los enfermos terminales pueden sufrir efectos secundarios fatales debido a la aplicación de la vacuna contra el Covid-19.

Más de 30 mil personas han recibido la primera dosis de la vacuna de Pfizer o Moderna en el país escandinavo desde fines de diciembre, de acuerdo con las cifras oficiales.

No estamos alarmados por esto. Está bastante claro que estas vacunas tienen muy poco riesgo, con una pequeña excepción en el caso de los pacientes más débiles”, dijo el director médico de la agencia, Steinar Madsen, a la emisora NRK.

Días atrás, el Instituto Noruego de Salud Pública dijo que “cualquier efecto colateral de la vacuna será compensado por un riesgo reducido de enfermarse gravemente de covid-19”.