Al manifestar que lo que “lo que no suena lógico, suena metálico”, el presidente Andrés López señaló que la oposición está en contra de que se construya el tramo 5 del Tren Maya, de Playa del Carmen a Tulum, por intereses y porque es “donde hay más dinero”.
En su conferencia en Isla Mujeres, Quintana Roo, López reiteró que con el Tren Maya no se afectan cenotes ni ríos subterráneos, además de que de Mérida hasta Chetumal es eléctrico.
“Imagínense cuánto se va evitar de emisiones de gases contaminantes”, dijo.
“Todo el derecho de vía lo tenemos, porque aquí hay una serie de intereses que no quieren que avancemos en la construcción del Tren Maya; no son los de Felipe Carrillo Puerto, no son, decía yo los ejidatarios de esta zona, son intereses y donde hay más dinero, para decirlo con claridad. Y lo que no suena lógico, suena metálico.
“Sin embargo, vamos avanzando y vamos a continuar haciéndolo. Sí está abierto al diálogo, le hemos comentado a los auténticos ambientalistas que hablen con la gente, porque se han hecho consultas y se les ha preguntado a la gente, los campesinos y la mayoría no hemos tenido oposición; se han grabado de manera espontánea, no de estos mensajes que hacen los artistas, sino lo que expresan los campesinos, los sentimientos de la gente y no hay oposición”, agregó.
Acompañado por el gobernador Carlos Joaquín González, López criticó que los amparos no son interpuestos por ejidatarios o por pequeños propietarios, sino por organizaciones, algunas de ellas, acusó, financiadas por el gobierno de Estados Unidos.
“No hay poseedores de tierra que están parados, ya todos dieron su anuencia, son de organizaciones, algunas financiadas por empresarios, otras, incluso financiadas por el gobierno de Estados Unidos, un poco lo que pasó con el aeropuerto Felipe Ángeles que llovieron los amparos”, dijo.
Andrés aseguró que en la mayoría de la ruta del Tren Maya han tenido el apoyo de campesinos y comunidades, quienes “han tenido una actitud muy generosa, muy fraterna, nos han dado su confianza”.