Este viernes a las 8:30 de la mañana, una familia de cuatro integrantes vivió momentos de terror en Irapuato cuando el suelo se abrió repentinamente bajo su vehículo en la calle Ignacio Manuel Altamirano, entre Ignacio Allende y Avenida Revolución. En el mismo instante, un camión repartidor de refrescos también fue arrastrado por el enorme socavón que se formó.
Los equipos de rescate, incluidos bomberos y Protección Civil, junto con vecinos de la zona, respondieron rápidamente al incidente y lograron poner a salvo a la madre y sus tres hijos, de 1, 7 y 9 años. Afortunadamente, todos resultaron con golpes leves y raspones, sin lesiones graves. Los trabajadores del camión también lograron escapar sin heridas significativas.
Las personas rescatadas fueron evaluadas por servicios médicos y se declararon fuera de peligro, aunque se lamentaron las pérdidas materiales, especialmente en los vehículos que cayeron en el boquete. La zona fue acordonada por la Policía Municipal, quienes brindaron apoyo a los equipos de emergencia y a los afectados. Para retirar los vehículos del socavón, fue necesaria la utilización de una grúa de gran capacidad.
Este incidente resalta la importancia de la vigilancia en áreas propensas a hundimientos y el rápido actuar de las autoridades y la comunidad para proteger a los afectados.