La canciller alemana Angela Merkel y el presidente argentino Mauricio Macri ponderaron el el comercio multilateral y destacaron la necesidad de luchar contra el cambio climático.
Al término de un encuentro bilateral en la casa de gobierno Merkel, de visita oficial en Argentina, señaló que conversó con Macri sobre “el compromiso de defender el acuerdo de París” del cual anunció su retiro el presidente de Estados Unidos Donald Trump.
Macri señaló que coincide con Alemania en su lucha contra el cambio climático y recordó “las sequías e inundaciones” que han afectado en los últimos meses a Argentina como una manifestación de este fenómeno.
Merkel dijo que “hay un potencial de desarrollo de energías renovables argentinas al que pueden contribuir empresas alemanas”.
A su vez, ambos mandatarios mostraron su sintonía sobre la próxima cumbre del Grupo de los 20 países industrializados y emergentes que se realizará en julio en Hamburgo.
“Argentina nos apoya fuertemente y nosotros próximamente devolveremos esta cooperación” cuando el país latinoamericano sea sede de esa reunión internacional en 2018, afirmó Merkel.
Indicó que coincidieron con Macri en la necesidad de «conformar un mundo interconectado» y elogió al argentino por su “apertura y fortalecimiento de relaciones con muchas partes del mundo”.
Al ser consultada sobre si en el encuentro en Hamburgo podrían reflejarse discordancias de la mayoría de los países con el proteccionismo estadounidense, Merkel dijo que “ningún país está solo en el mundo, ninguna persona sola es capaz de resolver los problemas, todos tenemos que cooperar” y admitió que habrá puntos “en los que no todos obtendremos lo que desearíamos”.
Argentina y Alemania, añadió, abogan “por un mundo libre y abierto” y en “dar un cariz humano a la globalización”.
Merkel indicó además que un punto importante de la agenda de la cumbre será aumentar las inversiones en África, continente vecino de Europa donde la población va en aumento, y potenciar allí el crecimiento.
A su turno, Macri elogió “un esquema de comercio multilateral que sea justo pero claramente desarrolle capacidades de cada comunidad”.
Sobre las negociaciones de la Unión Europea y el Mercosur -que forman Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay- para alcanzar un acuerdo comercial, Merkel reconoció que son “duras” y que queda “bastante trabajo por delante”. Admitió asimismo que Alemania no ha sido a veces “fácil” en lo que se refiere al proteccionismo agrícola.
“Pero cuando hay voluntad de concluir un acuerdo hay buenos motivos para hacerlo”, afirmó la canciller.
Macri dijo que, pese a su crisis, Brasil “está perfectamente alineado” con la consecución del acuerdo así como Paraguay y Uruguay.
Merkel también apoyó las reformas económicas que realizó Argentina y consideró que las condiciones “se han vuelto más fiables” para que lleguen inversiones.
Asimismo respaldó el deseo argentino de ingresar a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Merkel viajó acompañada de una delegación de empresarios alemanes que, según dijo, “ven oportunidades de inversión”.
Alemania fue el cuarto socio comercial de Argentina en 2016 detrás de Brasil, China y Estados Unidos, según la Cámara Argentina de Comercio y Servicios.
El balance comercial bilateral mostró un déficit para Argentina de 1.781 millones de dólares durante el año pasado.
Antes de la reunión con Macri, Merkel visitó la sinagoga de la Congregación Israelita de la República Argentina, cuyo órgano fue restaurado con fondos alemanes.
Allí recordó que muchos judíos que huyeron de los nazis “encontraron un nuevo hogar” en este país sudamericano.
La gobernante alemana también calificó de “terribles” los dos atentados de los que fue objeto en los años 90 la comunidad judía en Argentina, la más numerosa de América Latina. Los ataques a un centro judío y a la embajada de Israel causaron más de un centenar de muertos y han sido atribuidos a Irán por la justicia local.
Merkel visitó luego el Parque de la Memoria donde se recuerda a las miles de víctimas de la dictadura de 1976 a 1983.
