El caso que sigue la Procuraduría General de la República (PGR) contra el aspirante presidencial Ricardo Anaya por el presunto delito de lavado de dinero tomó un nuevo giro en días pasados, cuando un notario del estado de Jalisco negó haber estampado su firma en algunos documentos que forman parte de la carpeta de investigación.
De acuerdo con el diario El País, Salvador Cosío declaró ante la PGR que alguien falsificó su firma en al menos tres documentos, mismos que avalan un cambio accionario en la compañía que compró a Anaya Cortés una nave industrial en Querétaro por un precio de 54 millones de pesos.
El notario, hijo del exgobernador priista Guillermo Cosío Vidaurri y actual precandidato del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) al gobierno de Jalisco, presentó una denuncia contra quien resulte responsable por el delito de falsificación.
Ricardo Anaya insiste en que vendió la nave industrial a Manhattan Master Plan, supuestamente propiedad de un arquitecto llamado Juan Carlos Reyes; esta empresa fue creada con el único propósito de realizar la transacción inmobiliaria, de acuerdo con la PGR.
Además, la investigación de la Procuraduría señala que los socios originales de Manhattan Master Plan eran Luis Alberto López, chofer del empresario Manuel Barreiro, y su esposa María Amada Ramírez Vega.
Uno de los abogados que fungen como testigos protegidos en el caso declaró que él mismo modificó el acta constitutiva de la empresa para cambiar el nombre del dueño a Juan Carlos Reyes. Los documentos que avalan estos cambios son lo que Cosío niega haber firmado.