Foto: Especial/Síntesis

El coordinador auxiliar médico epidemiólogo del Instituto Mexicano del Seguro Social, Humberto Francés Salgado, recordó la importancia que tiene la higiene de manos, pues es un procedimiento muy sencillo y por lo mismo fácil de olvidar debido a las tareas que se realizan comúnmente, lo que aumenta el riesgo de transmitir infecciones.

Explicó que existen diferentes tipos de bacterias y microorganismos que pueden ser adquiridos mediante el contacto directo con superficies u objetos contaminados, por lo que al introducirlos a la boca o frotarse los ojos, las personas pueden contraer severas enfermedades e infecciones que pongan en riesgo la salud.

Por ello, indicó que lavarse las manos correctamente es un hábito muy importante. Recomendó frotar las manos con agua y jabón durante al menos 40 segundos, ya que las manos entran en contacto con otras personas y con objetos a alrededor, convirtiéndose en portadoras de enfermedades e infecciones.

Francés Salgado dijo que por esta razón, con el fin de evitar la propagación de gérmenes y bacterias que afecten a la derechohabiencia, todo el personal de salud del IMSS lleva a cabo las medidas necesarias para realizar la correcta higiene de manos, las cuales se basan en indicaciones emitidas por la Organización Mundial de la Salud.

El área hospitalaria del IMSS realiza el lavado de manos en cinco diferentes momentos de la jornada laboral: antes de estar con un paciente y después de atenderlo, así como después de estar en contacto con su entorno; antes de realizar un procedimiento estéril o al estar expuestos a líquidos corporales, de igual forma, está acción se hace al estar el personal expuesto a organismos infecciosos o después de un sufrir un accidente con objetos filosos.

El principal compromiso del IMSS es garantizar la seguridad de los pacientes al mantener o mejorar las buenas prácticas de higiene, creando un ambiente y entorno limpio y saludable que actué en beneficio tanto del personal así como de los pacientes”.

Para finalizar, subrayó que la población en general también debe tener como práctica el lavado de manos durante el día a día, ya sea en el trabajo o en casa, con énfasis en las siguientes situaciones: lavarse las manos antes y después de ir al baño, antes de manipular o ingerir alimentos así como al inicio y término de la jornada laboral.