En contra de una red de corrupción integrada por 30 funcionaros públicos y proveedores del programa “Escuelas de Tiempo Completo”, de la SEPH, fue levantada ayer una carpeta de investigación ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo, por los presuntos delitos de peculado, cohecho, enriquecimiento ilícito y lo que resulte, por 663 millones de pesos de recursos estatales y federales.

En conferencia de prensa, el director Jurídico de la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH), Carlos Emilio Arozqueta Solís, y el director del programa Escuelas de Tiempo Completo, Raúl Meléndez Meneses, informaron sobre la expedición de cuatro mil cheques para amparar la compra de alimentos de baja calidad facturados con precios superiores a los del mercado, a empresas favorecidas; por gastos en eventos no realizados y otras desviaciones, afectando con ello a 89 mil estudiantes que debieron ser beneficiados con el programa.

Arozqueta Solís detalló lo relacionado a la carpeta de investigación 12-2017-03698, iniciada por una serie de irregularidades en la que no se tiene contemplado, además, el cobro  que se hiciera a padres de familia por el menú de los niños, pues dijo, este programa es totalmente gratuito.

El funcionario explicó que al inicio de la presente administración se recibió de la Federación un requerimiento de que fuesen comprobados 41 millones de pesos del programa Escuelas de Tiempo Completo que no estaban en las cuentas bancarias de la institución, y que fueron entregados en la administración anterior.

Ante esto, la SEPH inició el 23 de marzo del año en curso, inició la carpeta de investigación 12-2017-03698, siendo encontradas diversas anomalías muy llamativas, “y hoy podemos concretar que de noviembre del 2014 a enero del 2017, hubo una aplicación incorrecta, discrecional y con tintes delictivos de 663 millones de pesos”, subrayó el funcionario.

Entre las irregularidades detectadas en este programa, dirigido entonces por Luis Fuentes Hernández, se citaron el manejo de recursos no comprobados, el manejo de cheques expedidos pero que no fueron cobrados por los destinatarios; gastos por gasolina, vehículos y viáticos no comprobados; facturación por eventos no realizados, alimentos destinados a alumnos fantasma, alimentos con calidad muy inferior a la facturada y favoritismo a empresas abastecedoras.

Manejos turbios que se dieron en los municipios de Tulancingo, Tenango de Doria, Huejutla, Atlapexco, Tizayuca y Molango, donde se tiene “perfectamente identificados a los coordinadores regionales, a los directores de las escuelas”, de los que se tiene un cúmulo de pruebas para actuar en su contra, añadió.

Los cheques fueron firmados por el titular de Finanzas de la SEPH en la administración anterior, Pablo Pérez Martínez, y por José Antonio Turrubiate, dijo, pero enfatizó que correspondía a los encargados de aplicar los recursos el manejo correcto de los mismos.

Es un cúmulo de irregularidades, añadió, “que no pudieron darse sin la existencia de una red de corrupción de cuando menos 30 servidores públicos y proveedores del sistema”, que “sistemáticamente y mancomunadamente hacían el ejercicio de los recursos dejando a su paso beneficios indebidos y perjudicando a los alumnos”, al no recibir la educación y la  alimentación gratuita contemplada en el programa.

Una red que se espera, dijo, que con la intervención de la Procuraduría General de Justicia se ayude a desmantelar.

A pregunta expresa, el funcionario dijo desconocer que en las escuelas se cobraran los menús a los padres de familia, por lo que invitó a aquellos padres que pagaron por los mismos, a presentar la queja correspondiente ante la institución para proceder al respecto.

Finalmente señaló Meléndez Méndez que el programa Escuelas de Tiempo Completo tiene un presupuesto “blindado” hasta el último día de diciembre del año en curso,  por lo que continuará al inicio del próximo ciclo escolar.