Mientras el sábado el otrora denominado “primer priista de México”, el presidente Enrique Peña Nieto, dio el banderazo de salida a los aspirantes a la candidatura tricolor a la presidencia de la república, en Hidalgo también se cocina una candidatura que a últimos tiempos cobró gran relevancia: la presidencia del Consejo Coordinador Empresarial de Hidalgo.
Una renovación del consejo directivo del CCEH, considerado como el organismo empresarial cúpula en el estado, que se dará, en plena efervescencia electoral por las candidaturas a diputados federales y senadores.
El actual presidente del consejo, Juan Carlos Martínez Domínguez, respetado empresario local y reconocido por su liderazgo empresarial desde la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Pachuca, y ahora desde el CCEH, concluirá en diciembre su gestión y deberá ser sustituido.
Para quienes gustan de especular en lo político y lo económico la situación en el consejo no resulta fácil, como ocurrió hace tres años, cuando todos los dedos apuntaban, sin dudarlo, al presidente ejecutivo del consorcio Celular Millenium; la verdad es que ahora no hay un personaje que destaque con tanta claridad.
Y es que además Martínez Domínguez dejará unos zapatos difíciles de llenar, pues más allá de la controvertida amistad y cercanía con Omar Fayad Meneses, muy señalada por quienes buscan por doquier conflicto de intereses… para sus propios intereses, el empresario consiguió encargarse del consejo sin descuidar a “Celmi”, la que ha seguido creciendo pese al entorno económico nada fácil.
Rodean a Martínez Domínguez empresarios con una larga trayectoria dentro del consejo y con un intenso trabajo en su interior, como es el caso de Jorge Rivera Ranero, presidente de la Alianza Turística Hidalguense; el constructor Edgar Espínola Licona; la empresaria de voz firme –alta, le califican algunos- y responsabilidad a toda prueba, Gabriela Mendoza, entre otros que 100% fieles han seguido la guía trazada por Martínez, como es el caso de Juan Jesús Bravo Aguilera, presidente de la Canaco Pachuca.
Quien llegue a la presidencia del CCEH heredará tremendos paquetes dejados por Martínez Domínguez, como el Instituto de Estudios Económicos del Sector Privado o el Centro de Vinculación Empresarial, este último, a ser inaugurado en los próximos días.
Obedecen ambos a proyectos impulsados por el empresario con el objetivo, primero, de contar con información precisa, actualizada, de los sectores productivos en la entidad y del comportamiento de la economía estatal, y el segundo, para ofrecer herramientas a los emprendedores que les permitan fructificar sus proyectos.
Mucho se especulará seguramente sobre el futuro de Martínez Domínguez, quien era señalado durante la campaña de Omar Fayad como futuro secretario de Economía o de Finanzas, aunque él rechazó reiteradamente tener esa aspiración.
No faltará quienes comiencen a señalarle como posible candidato a diputado federal o senador, aunque gente cercana a él coincide en que es interés del “Slim hidalguense” seguir ampliando el consorcio que preside con más y más innovaciones tecnológicas, en un crecer propio de quien no conoce de fronteras.
Ni tampoco faltan quienes hacen notar la necesidad de que llegue al Senado un representante realmente comprometido con el sector empresarial, con las relaciones que tiene al más alto nivel en los distintos ámbitos.
Algunos lo visualizan como futuro presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco), lo que le permitiría, igualmente, incidir en lo económico y gubernamental.
En fin, Dios dirá, decía la abuela.