Salvo algunos casos de robo de maquinaria menor, pronto y efectivamente atendidos por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJEH), la industria de la construcción dejó de ser víctima, en el último año, de robo de maquinaria pesada que afectó muy severamente a las empresas.
“Hemos tenido robos pero menores, y las autoridades han intervenido muy oportunamente”, aseguró el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Carlos Henkel Escorza.
Se ha tratado de revolvedoras, de compactadoras, cuyos casos han quedado resueltos, pero nada comparado con los robos de maquinaria pesada que se sufrió en años anteriores, valuada en millones de pesos, lo que terminaba afectando seriamente las finanzas de las empresas.
Un cambio favorable que para el representante de los constructores en la entidad, se ha dado gracias acciones emprendidas por los propios empresarios y por las autoridades.
Es el caso de dejar de mover maquinaria pesada a determinada hora de la tarde, y evitar su traslado por la noche y madrugada, además de contratar vigilancia durante las horas de inactividad en las empresas.
“Nosotros como empresarios hemos tenido que contribuir para nuestra propia seguridad, contratar vigilantes, evitar traslados nocturnos de maquinaria, pues era por la noche que la robaban”, afirmó el industrial.
Destacó además la atención brindada por las autoridades, “que nos han traído charlas de orientación y que han atendido con presteza nuestras denuncias”.
Cabe recordar que en los años 20014 y 2015 los constructores en Hidalgo resintieron el robo de maquinaria con precios de varios millones de pesos, lo cual fue reiteradamente denunciado por el presidente de la CMIC en turno.
Los constructores denunciaron también a principios del presente año una serie de llamadas de extorsión a quienes ganaban licitaciones de obra, lo que se frenó con la intervención de la Secretaría de Finanzas, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y la propia procuraduría.
