Hace unos días, a invitación expresa de la maestra Verónica, que imparte clases a mi hija, fui conminado a platicar con alumnos de 5to año de primaria, para explicarles algunos conceptos relacionados con el periodismo, y fue una grata experiencia poder conocer las inquietudes de las y los alumnos, porque pude constatar que estas nuevas generaciones están ligadas principalmente a la tecnología y las nuevas formas de comunicación.

Los menores, apenas conocen la existencia de algunos medios de comunicación impresos, evidentemente porque no convergen en este momento con alguna actividad relacionada al periodismo ni nada que se le parezca, es más, apenas y tienen tiempo para atender las tareas propias de la escuela y no hay cabida para otra cosa.

Esta charla me permitió conocer que los medios por los cuales se enteran de alguna noticia, principalmente la pueden observar a través de algún dispositivo, cosa normal en estas nuevas generaciones que en su mayoría tienen a su alcance estas herramientas que ayudan en muchos casos a hacer su tarea o como un medio de entretenimiento.

Pero fui enfático en comentarles que deben de considerar la lectura como un hábito diario, ya que además de ser necesario para su desarrollo académico, también les permite tener a su alcance información de interés general para mejorar su acervo cultural y su forma de comunicarse con los demás, de tal manera que les puedan tener un amplio lenguaje que les abra las puertas en su vida profesional o a cualquier cosa a la que se dediquen.

Por supuesto que no cayó del todo bien mi petición a algunos alumnos, porque es evidente que desearían invertir su tiempo en algo más dinámico o más entretenido, pero sencillamente lo hice con la firme convicción de que una vez que adopten el hábito de la lectura a esta edad, con el paso de los años les parecerá apasionante y hasta necesario saber muchas cosas que ocurren a nuestro alrededor.

Yo solo espero que Miss Vero esté convencida de mi propuesta y les ayude a desarrollar esta habilidad que sin duda será muy necesaria para su formación académica y que podamos contar con una generación de niños interesados en la lectura, porque en la medida de que estén más informados, tendrán mayores argumentos para lo que les espera más adelante.

Esta grata experiencia es enriquecedora desde todos los ángulos que se pueda ver, al menos para mí fue un momento de intercambio de ideas, de conocer las inquietudes y sobre todo de saber los retos de las nuevas generaciones de niños que avanzan vertiginosamente al ritmo de las necesidades actuales.

Desde casa, debemos ayudar a nuestros hijos para estar más en contacto con la historia, con el entorno, con los grandes acontecimientos que han ocurrido a través de los años e incentivarlos a conocer cosas que serán parte de su formación e intelecto. Los niños de ahora, están en otra sintonía, y como lo he comentado anteriormente en este espacio, la tecnología no está peleada con las nuevas dinámicas de la vida, por el contrario, han venido a sumar y a simplificar las formas de hacer las cosas de manera incesante.

Pero llevemos a buen cause estas herramientas tecnológicas y la convivencia con nuestros hijos, para que puedan aprovecharlas con todo el potencial que representan. Por lo pronto, media hora de lectura todos los días, podría ser un buen inicio para estos pequeños estudiantes del colegio Miravalle. Un saludo para ustedes.

 

Hasta la próxima

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