La Secretaría de Salud de Hidalgo informó que el cardiólogo del Hospital General de Pachuca, Eduardo Zambrano Ruiz, desde la puesta en marcha del área de hemodinámia hace cuatro años, se propuso homologar la información que le llega a los usuarios de los servicios de salud, sobre las características y sintomatología que les permita identificar un posible infarto agudo al miocardio.

Gracias a su iniciativa, actualmente la sala de urgencias del hospital de Pachuca cuenta con toda la señalética necesaria que permite tanto a los pacientes como al personal médico, seguir paso a paso el procedimiento para la atención de un posible caso de infarto.

“El Hospital General se suma a una estrategia nacional, con la finalidad de brindar la atención temprana y oportuna a todos aquellos pacientes que lleguen a sufrir esta condición, una complicación cardiovascular que conocemos como infarto agudo al miocardio, y se caracteriza por la obstrucción de alguno de los vasos que nutre precisamente al corazón”.

Zambrano Ruiz explicó que el primer filtro para la atención de un infarto agudo al miocardio es cuando el propio paciente toma conciencia de síntomas como: dolor opresivo en el pecho que se extiende a la parte interna del brazo izquierdo o la espalda, e incluso a los dientes o mandíbula acompañado de dificultad para respirar, sudoración y palidez y en algunos casos mareos, náuseas, vómitos y perdida del conocimiento.

De esta manera, sin importar el escenario de primer contacto, la secuencia del infarto agudo al miocardio es la misma en México, iniciando con la fase de Identificación, cuando el paciente presenta síntomas y acude al área de urgencias para su atención inmediata.

El siguiente paso es la Confirmación, paso posterior a la identificación, en donde mediante un electrocardiograma se descarta o avala el infarto.

Acto seguido viene la Activación, con el inicio inmediato del sistema de urgencias médicas, que comprende la alerta de los recursos médicos y paramédicos para priorizar la atención de este tipo de pacientes.

Con ello se da paso al Tratamiento, donde la prioridad en este paso es la aplicación de la reperfusión y luego el Traslado a un hospital donde se puede continuar con la estrategia, ya sea farmacoinvasiva o angioplastia.

“Una vez establecido el diagnostico en el área de urgencias, tenemos 10 minutos, en lo que estamos realizando un electrocardiograma, y 10 minutos más para valorar si vamos a tomar la decisión de suministrar el medicamento este medicamento que llamamos trombolítico”.

“En realidad estamos haciendo 20 minutos y estos son estándares internacionales, no es un estándar que tengamos que improvisar, está perfectamente bien establecido”.

Zambrano Ruiz detalló que son precisamente estos pasos los que de manera visual buscan posicionar en los diferentes hospitales, a través de imágenes y lonas colocadas de manera estratégica, para que, tanto pacientes como personal médico mantenga un protocolo de actuación adecuado.

Lo anterior debido a que este proceso no debe tardar más de 20 minutos, tiempo suficiente para salvar un corazón, “entre más corto sea el tiempo, mayor cantidad de músculo vamos a rescatar”.

Es precisamente la estrategia farmacoinvasiva o angioplastia la que implica la participación del personal ampliamente calificado, que en el caso del Hospital General de Pachuca, atiende a cerca de 90 casos al mes y en total, desde la apertura del área, 350 angioplastias mensuales.

Zambrano indicó que la angioplastia busca salvar la mayor cantidad de musculo cardiaco, al abrir la arteria culpable del infarto. El proceso comprende introducir un tubo delgado a través de un vaso sanguíneo del brazo o de la ingle hasta el área afectada de la arteria. Este tubo o catéter con un pequeño dispositivo en la punta, empuja ensanchando la arteria y restituyendo el flujo sanguíneo.

El Hospital General de Pachuca es el lugar de referencia obligado para estos ataques, ya que cuenta con sala de hemodinámica y por tanto, es un hospital con capacidad de manejo de IAMCEST, para pacientes provenientes de otros nosocomios que realizaron el sistema de emergencia de manera adecuada.

Sin embargo, se pretende que todos los hospitales puedan desarrollar la atención hasta el salvamento del paciente.

El especialista en cardiología señaló que debido a que en México los infartos al miocardio representan la primera causa de muerte, además de constituirse como un factor importante de discapacidad y pérdida de años productivos, es importante contar con información precisa que permita reconocer y atender de manera oportuna los casos de infarto, pues además de salvar una vida, la oportuna atención, permite mantener una buena calidad de vida para el paciente y devolver al enfermo una vida igual de productiva que antes del infarto.