Por considerar que no existen fundamentos para un aumento en el precio de la tortilla, la delegación de la Profeco advirtió que intensificó el monitoreo en expendios y se sancionará a los que se sorprenda elevando el precio. Sin embargo hasta ahora no se ha recibido ninguna queja al respecto.
En un comunicado oficial en el que no se precisa el precio tolerado de este alimento, y que se vende en 14 pesos el kilo en el grueso de los expendios, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), precisa que “el precio de la tortilla se vino ajustando en 2017, de acuerdo al impacto proporcional en la variación del precio de algunos de sus insumos (principalmente energéticos).”
Considera entonces que “hacer una declaración anticipada de un ajuste coordinado de precios en cualquier sector de la economía –como señalara la Unión Nacional de Productores de Masa y Tortilla, en días pasados-, es una violación flagrante a las leyes de competencia económica.”
El titular de la Profeco en la entidad, José Alberto Chávez Mendoza, advirtió que “en apego a las instrucciones giradas a nivel nacional por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), está delegación vigilará y, en su caso, sancionará cualquier aumento arbitrario en los precios de la tortilla.”
Advirtió el funcionario que se intensificará el monitoreo y la supervisión de los aspectos comerciales, (precios a la vista y básculas calibradas), en los expendios de masa y tortilla, así como en los principales establecimientos comerciales del estado.
Finalmente recomendó que “si una tortillería no respeta los precios, denuncia con nosotros a través del 01 800468 8722, 71 9 4800, 71 4 0505 ext. 104 y 107), en la página electrónica www.profeco.gob.mx o personalmente en Cuauhtémoc esquina con Pasaje a la Iglesia La Villita 700, en la colonia Revolución.”
