Parece que la política no solamente está diseñada para hacer olvidar todo y olvidarse de todo, desde propuestas, promesas y principalmente todo tipo de declaraciones; parece que esta actividad que es la más desprestigiada, tiene como principal premisa dejar todo al tiempo, lo cual por lo visto hasta el momento es bien aprovechado no por algunos abusados sino abusivos, con un reducido grupo de familiares, amigos y compadres, que al tener la oportunidad se quedan con todo.
Una muestra de lo que aquí se dice, son las propuestas, promesas y ofertas hasta con cantidades específicas por parte de los diferentes actores políticos, eso luego de la destrucción que dejaron los sismos de septiembre pasado, es que hasta el momento no ha pasado nada, porque de haberse dado en mínimo de los apoyos, lo primero que hubieran buscado serían los reflectores y espacios publicitarios pagados aunque estos hubieran sido más caros que los apoyos entregados a quienes perdieron no solo un familiar o amigo sino hasta sus bienes inmuebles.
Es más que obvio que no les convenía estar sobre el tema, porque se acercaba los tiempos de asignación de recursos para el proceso electoral en curso, y por eso ya nadie habló del tema y mejor dejaron que su mejor aliado -que es el tiempo- pasara igual que siempre, no solamente para los afectados sino también para la población en general, para que se olvidara ese y todos los temas que afectan a las mayorías y que pueden hacer volver los tiempos de unidad social como lo pudo hacer el llamado gasolinazo, el cual como si fuera burla, ya que el incremento de los precios en los combustibles se mantiene hasta el momento sin que nadie se decida o quiera hacer nada.
De acuerdo con comentarios de diferentes personas y politólogos, es tiempo de que las circunstancias actuales hagan reflexionar a la clase política respecto a la situación del país la de ellos mismos, sus grupos políticos y hasta partidos debido a que la desconfianza ha rebasado sus límites y ocasiona en estos momentos que nadie se pueda decir ganador; también provocan el desánimo para salir a las urnas a votar por quien se considera menos peor o bien solamente para dar oportunidad a quienes de alguna manera tengan intenciones de sacar adelante a la nación, pero con el riesgo de que les suceda lo mismo que a todos y después en el afán de mantenerse en el poder caigan en el autoritarismo y todas las situaciones que se han visto en México.
Respecto a que la política hace olvidar todo y muestra de ello es que las actuales circunstancias dan la razón, debido a que en estos momentos que son considerados como los de mayor efervescencia política en todo el país lo que ha pasado llámese gasolinazo, asesinatos, inseguridad y hasta desgracias como las ocurridas en septiembre del año pasado, ha hecho que se deje a un lado todo aquello que los líderes de los diferentes partidos políticos dijeron ante los reflectores respecto a que iban aportar parte de sus prerrogativas para los afectados.
Sin embargo no ha sucedido nada, no se ha cumplido con esas promesas y parece que todo va a quedar en el olvido, además de que estos personajes poco han hecho ante las supuestas acciones de abuso contra los afectados por los desastres naturales de septiembre pasado y por lo que se puede apreciar nada va a cambiar.