En esta temporada vacacional, los ahogamientos en playas, presas y cuerpos de agua constituyen una de las principales causas de muerte accidental, después de los fallecimientos causados por accidentes de tránsito, advirtió la Secretaría de Salud de Hidalgo, por lo que exhortó a la población y a los paseantes a no desatender esta advertencia y evitar accidentes que puedan tener consecuencias fatales.
La SSH informó que de acuerdo con estimaciones del Consejo Estatal para la Prevención de Accidentes (COEPRA), durante las vacaciones estos accidentes se incrementan entre 5 y 10 por ciento, principalmente en playas sin vigilancia, por lo que se hace un llamado a los responsables de las familias a extremar precauciones.
La Secretaría de Salud de Hidalgo recomendó nadar siempre en zonas vigiladas por las autoridades y estar alerta a sus recomendaciones, además de que los padres de familia se deben de informar sobre el contenido y significado de las banderas dispuestas en las playas.
En los menores de 10 años, la principal recomendación es mantenerlos en constante vigilancia y colocarles flotadores o chalecos salvavidas.
En el hogar se sugiere mantener cerrados tinacos, pozos, piletas, contenedores o depósitos de agua.
En el caso de cisternas, se exhorta a mantenerlas cerradas con una tapa metálica y candado u otro mecanismo que imposibilite su apertura por parte de algún menor de edad, ya que una lámina, plástico o madera sobre estos contenedores no son seguros, por el contrario, aumenta el peligro de caer en uno de ellos.
Los ahogamientos en niños pequeños también pueden ocurrir en bañeras, e incluso hasta en cubetas si no están vigilados los pequeños, por este motivo, la SSH enfatizó que los menores siempre deben estar al cuidado de un adulto que supervise sus juegos.
Además, las albercas de plástico, cubetas y tambos en los patios y terrazas se deben vaciar después de utilizarse.
En lo que se refiere a ríos, lagos o lagunas, se debe nadar sólo en las partes bajas, sin corriente y de manera indispensable, con la vigilancia de las autoridades y familiares adultos, así como atender todas las indicaciones y señalamientos que alerten sobre algún riesgo a quienes ingresen al agua.
En todos los casos se exhorta a que los menores nunca naden solos y sin la supervisión de un adulto, pues en caso de peligro o desmayo, no habrá quien pueda auxiliarlos a tiempo.
De igual modo, se debe procurar nadar en aguas poco profundas y que las personas eviten lanzarse al agua en lugares donde se desconozca la profundidad, ya que puede generar lesiones de gravedad en la columna vertebral, que en ocasiones pueden llegar a provocar una parálisis permanente.
La Secretaría de Salud exhortó a evitar comportamientos riesgosos en cuerpos de agua, ya que la prevención es vital para salvar la vida y evitar algún percance.