Con la llegada de la Semana Santa se multiplicó la oferta de los más variados productos comestibles y artículos de temporada en las inmediaciones del mercado Primero de Mayo, en Pachuca, en donde se puede encontrar, literalmente, de todo.
Caminar a empellones y pisotones no desalienta a las personas a transitar entre los puestos, en el piso, con la mercancía sobre lonas o plásticos, en el atrio de la iglesia de La Asunción, o en el tramo de los portales junto a este templo.
Y es que en estos espacios, no mayores a unos 100 metros cuadrados, pueden comprarse desde moras recién cortadas hasta hojas de plátano para tamales, artículos religiosos y hasta pomadas que, se dice, lo curan todo.