El presidente de la organización ambiental Biofutura, Jonathan Job Morales García, lamentó el poco o nulo acercamiento que han tenido las autoridades ambientales en el estado para atender temas de derechos animales no humanos, en específico, en el caso del puma cazado en el municipio de Xochicoatlan en marzo pasado.
Según el activista, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Estado, a lo largo de diez años, ha rechazado el trabajo coordinado para trabajar en pro de la vida animal, en específico, en la actual administración se han cerrado las puertas a la organización civil con más de12 años de experiencia.
Aseguró que la dependencia desconoce del trabajo que debe implementar en el estado en materia medio ambiental: “tienen conocimiento limitado del campo, nos saben cómo generar acciones”, refirió el presidente de la organización, argumentando que en el caso del puma, Biofutura pidió que se utilizar el fondo de aseguramiento ganadero para las familias que habían sido afectadas, no obstante, no se aplicó.
Por la denuncia de un puma el pasado mes de marzo, destacó que existe una mayor confianza de la población hacia las organizaciones de la sociedad civil, ya que se informó primeramente a Biofutura, quienes ingresaron la denuncia para dar con el responsable y del cual están a la espera de que se dicte la sanción por parte de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Indicó que en promedio tienen registro de al menos tres o cuatro pumas cazados en distintos puntos del estado, en un periodo de cinco meses, y para los cuales no se han tomado las medidas pertinentes.
La asociación civil que trabaja en la conservación de la biodiversidad y luchar por los derechos animales, destacó que a pesar de las autoridades del estado, existe una buena coordinación con autoridades como la Profepa, el Indesol, DIF, PGR, y los municipios.