Los taxistas de Pachuca, antros, comercio ambulante y quienes dan hospedaje a estudiantes, se preparan para la temporada de “resaca” que les representa el período vacacional de verano, cuando la demanda de servicio en el transporte se desploma entre un 40 y 50%, y los comerciantes ambulantes cambian de giro temporalmente.
Temporada baja en la demanda del servicio que ya inició hace unos días, al concluir el semestre en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH).
“Y en unos días más concluye el semestre en el Tecnológico de Pachuca, y en un mes, en preescolar, primaria y secundaria, y entonces sí, a transitar de vacío en busca de a ver qué nos cae”, comentó el taxista José Antonio Pérez Monzalvo.
Los períodos vacacionales escolares resultan difíciles para el gremio de taxistas, pues al no enfrentar las prisas de mover a los pequeños para llevarlos a las escuelas, o llegar a tiempo a clases para los de Educación Media Superior y Superior, “hasta la gente parece moverse con más lentitud”, asegura a su vez el chofer Esteban Barrón.
Sin embargo, este “bajón” en la demanda de servicio ya es esperado por los taxistas, que prefieren parar durante algunas horas, cuando son propietarios de su taxi, y sólo salir a dar servicio en las “horas pico”, para “evitar andar de vacíos, nomás gastando gasolina”.
Lo “más cañón” lo enfrentan los taxistas que rentan vehículos y deben “pagar cuenta”, pues haya pasaje o no, ellos deben entregar la misma cuenta “y en esos días salen casi a raya, pues los patrones lo que quieren es la cuenta”, se cometa entre los choferes.
Por eso agradecen muchos de ellos que los dueños de sus vehículos prefiera parar por algunas horas al día y descasar, “son nuestras vacaciones también”, dejando la poca demanda a los que deben “pagar cuenta”.
El mercado del transporte se recupera un poco al iniciar el asueto en Educación Básica, pero con servicios foráneos, de quienes llegan a Pachuca en autobús pero se dirigen a los balnearios y a los Pueblos Mágicos, principalmente. Sin embargo pocos choferes se arriesgan a dar estas “dejadas foráneas”, por el riesgo que entrañan.
Sin chamba, antros, fondas y taqueros
La salida de los estudiantes de preparatorias, bachilleratos, universidades y tecnológicos, causa una baja importante en las actividades comerciales y de servicios en la capital hidalguense.
“Vea usted los antros en Camino Real de la Plata, en la Zona Plateada, los jueves, y están a reventar, y los viernes y sábados, llenos también, pero en vacaciones se quedan vacíos, apenas con unos cuantos clientes locales”, hace notar el chofer Pérez Monzalvo.
Resienten también la falta de clases los comerciantes ambulantes y semifijos que “alimentan” al estudiantado, y que lo mismo venden tacos dorados que chalupas, tortas, tacos de guisado, tacos de carnitas, y mucho más, que frituras de harina y dulces.
Se quedan también sin clientela las casas de huéspedes que rentan habitaciones a estudiantes, pues sólo se quedan en vacaciones aquellos muchachos que recursan materias en verano o que realizan su servicio social.