La vocación del estado de Hidalgo es fundamentalmente agrícola, agropecuaria, y por tanto se requiere de inyectar muchos más recursos al campo. Con este fundamento, la Sedagro promueve entre los diputados locales y federales que el presupuesto de 580 millones de pesos autorizados este año, sea elevado “considerablemente”.
Para lograrlo, la dependencia trabaja en proyectos de desarrollo para presentar a las legislaturas entrantes, pues en lo local, busca también que se incrementen los recursos locales, que este año ascendieron a 120 millones de pesos, “y espero ir por lo menos por 180 millones”, afirmó el titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Carlos Muñiz.
“Lo que queremos es convencer a los legisladores federales y estatales de que sigamos con la sinergia que hemos alcanzado, con los proyectos que tenemos en proceso para elevar nuestra producción agrícola y agropecuaria”, aseguró el funcionario.
Para el secretario el cambio en las legislaturas es un nicho de oportunidades de elevar el monto de los recursos federales y estatales destinados al agro.
“Yo estoy convencido de que la vocación primaria de Hidalgo es la agrícola, la agropecuaria”, por lo que se impulsa fuertemente la producción de perecederos en surco y en invernaderos.
Hidalgo exporta ya, con éxito creciente y no solo a Estados Unidos, sino también a otros países de Latinoamérica, Europa y Asia, productos como pimiento morrón, nopal, granada, miel de abeja, miel de agave, por citar algunos.
Con mayores recursos para dotar de infraestructura al agro, dijo, será posible elevar esta producción sensiblemente, a la par de la de granos básicos como frijol o maíz, y de gran demanda en el mercado, como la cebada maltera.
Afortunadamente en la actualidad el campo ya es negocio, y el mercado nacional recibe muy bien la producción hidalguense de jitomate saladet y de bola, granada, pimiento morrón, aguacate criollo, entre otros.