Con el propósito de evitar que hasta en la designación de los apellidos de un menor, las mujeres queden en condiciones de inferioridad, la diputada local del grupo parlamentario del PAN en el Congreso del Estado, Claudia Lilia Luna Islas, presentó una iniciativa para modifique diversas disposiciones de la Ley para la Familia del Estado.

De acuerdo con la legisladora local, hasta la fecha al momento de registrar al o los hijos de una pareja sin importar sí son casados o procrearon en unión libre, el menor debe llevar primerio el apellido del padre, lo cual aseguró debe cambiar y haber libertad de prelación de apellidos de las y los hijos al momento de su registro de los infantes.

Esta iniciativa propone abrir la posibilidad de que sea la pareja quien decida qué apellido corresponde ir en primer término, para dejar atrás siglos de desigualdad, transformando la forma en que se lleva a cabo el registro de las personas, para que éste sea acorde a una concepción plural, democrática e igualitaria”.

Luna Islas añadió que a pesar de las desigualdades en que se desenvuelven las mujeres, han logrado ganar espacios por lo cual su labor e influencia es cada día más importante sin que esto se pueda reflejar de mejor manera en algunas determinaciones al interior del núcleo familiar decidió presentar la iniciativa con proyecto de decreto para que los hijos de una pareja también puedan llevar en primer lugar el apellido de la madre.

Si bien la iniciativa pretende terminar con prácticas que ponen a la mujer en condiciones de minusvalía frente al hombre, se preserva la costumbre de que las niñas y los niños lleven primero el apellido del padre, en aquellos casos en que los progenitores no lleguen a un acuerdo con relación a la prelación de los apellidos”.

La legisladora manifestó que en la búsqueda por la igualdad o equidad de género esta es un principio constitucional que estipula que tanto hombres como mujeres son iguales ante la ley, con los mismos derechos y deberes, pero aseguró que desafortunadamente no es suficiente que se tenga en la ley para que sea una realidad ya las oportunidades deben ser reales y efectivas en todos los ámbitos, principalmente en la familia.