Lo menos que se le puede desear al nuevo gobierno federal que a partir de este sábado encabeza Andrés Manuel López Obrador, es que le vaya bien y cumpla sus propuestas para que a la ciudadanía le vaya mejor, aseguró la diputada federal del Partido Acción Nacional por Hidalgo, Gloria Romero León.
La legisladora federal plurinominal añadió que a nadie conviene que a cada cambio de gobierno en su máximo nivel es que los resultados sean positivos y que le vaya bien, ya que en la misma medida la ciudadanía verá reflejados los beneficios en un mejor nivel de vida, que es en los tiempos actuales una de las principales demandas.
“Con este cambio de gobierno, que ahora es encabezado por el candidato de un partido totalmente diferente a lo tradicional, lo último que se le puede desear es que tenga buenos resultados, aunque en ese caso hay situaciones que vemos con preocupación que hay muchas decisiones y opiniones que desafortunadamente no son más que resultado de ocurrencias”.
Romero León aseguró que sí bien este tipo de situaciones son propias de alguien que inicia y que apenas se van acomodar, a ver de qué manera se encuentran las cosas y que deben tomar forma algunas cosas y de alguna manera organizarse, también es algo que no puede ni debe tardar mucho, además de que las cosas se deben tomar con mayor seriedad y responsabilidad.
“Es probable que apenas están iniciando y que las cosas deben tomar forma y que se organicen, pero creemos que hay cuestiones que deben ser tratadas con responsabilidad como son algunas declaraciones del ahora presidente de México, pero que hizo como mandatario electo, así como de muchos de los legisladores de su partido que han presentado y que ponen nerviosos a los mercados y eso no responde a más que a un tema de que debemos cuidar a este país”.
Por último, respecto a la administración federal saliente, manifestó que lamentablemente deja un país sin rumbo a pesar dijo de que en todo momento se pregonó que se trataba de un partido que sabía gobernar y que podían sacar adelante al país, peor al final resultó todo lo contrario y solamente deja un legado de los peores años de corrupción e impunidad en México.
