El estatus de desaparecidos de 71 personas tras la explosión que se originó en el municipio de Tlahuelilpan el pasado viernes en una fuga de combustible, causó incertidumbre entre los familiares y las autoridades quienes no podían determinar si las víctimas se encontraban entre los cuerpos calcinados o en hospitales con quemaduras graves.
Durante la mañana del sábado personal del Servicio Médico Forense resguardó la zona de la tragedia en la comunidad de San Primitivo, donde hasta las nueve de la mañana aún permanecían los cuerpos de personas calcinadas por la explosión.
Familiares, amigos y conocidos permanecieron a la expectativa esperando recibir información y descartar que entre los cuerpos estuviera su hijo, hermano, sobrino, padre o esposo; sin embargo, las autoridades tras realizar las diligencias correspondientes se retiraron del lugar para llevar a cabo los procedimientos forenses correspondientes.
Algunas de las personas expresaron su inconformidad acusando de una desorganización por parte de las autoridades de gobierno señalando que no tenían un control de los decesos y las personas trasladas a hospitales.
El presidente municipal de Tlahuelilpan, Juan Pedro Cruz Frías, dijo al respecto que algunas de las víctimas ingresaron a las unidades médicas con quemaduras graves, por lo que hasta la mañana del sábado no se podrían identificadas a todas; de igual manera, señaló que el reconocimiento de los cuerpos calcinados tomaría más tiempo.
Ante la urgencia de poder identificar a sus víctimas, se habilitó el Centro Cultural Regional de Tlahuelilpan, donde se publicaron las listas de las personas desaparecidas que sumó 71 y la lista de personas heridas en hospitales de diferentes municipios y de otros estados que contabilizó 79.
De esta manera, los familiares que esperaban resultados, fueron orientados sobre los trámites legales para el traslado de cuerpos en el caso de fallecimientos en hospitales y para el apoyo en gastos funerarios.
