El periodista Humberto Padgett, autor del libro “Estado de México, la monarquía de la barbarie”, se presentó en la segunda edición de la Semana de Periodismo Hidalgo 2019 para impartir la conferencia denominada Periodismo bajo riesgo en el lobby del teatro Gota de Plata.
Padgett, quien enfrenta una demanda por parte del ex gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas a raíz de las denuncias periodísticas que ha hecho en contra del grupúsculo que encabeza el ex mandatario mexiquense, en su ponencia planteó a los asistentes los problemas que significa ser periodista en México en este momento.
Consideró que en un momento en que se creía que el país había llegado a una democracia consolidada, con alternancia en la presidencia y en los estados, en que se puede contravenir al poder, discrepar del mismo, que puede ser viable tener un pensamiento distinto y así expresarlo, llamar a cuentas a los gobernantes sin importar cuál sea su cargo, pero a pesar de todas estas condiciones, el presente mexicano es el que se puede ver, en que luego de Siria, México es el segundo peor lugar del mundo para ejercer el periodismo.
Esto la basó en que de acuerdo a distintos reportes, alrededor de 140 comunicadores y periodistas han sido asesinados desde el año 2000, de los cuales apenas sólo han sido resueltos cinco casos de manera razonable, por lo que la impunidad hace que sea sumamente barato agredir a los periodistas, ya que las posibilidades de que un responsable sea detenido, procesado y sentenciado, son cero.
Padgett dijo que se asesina a periodistas en México porque no ocurre nada y no hay consecuencias, porque a pesar de la insistencia de democracias cimentadas para atender el problema de manera destacada y de la insistencia de las fiscalías especializadas en cada una de las 32 entidades, lo cierto es que no ocurre nada.
Expuso que además de estas agresiones, se han puesto en marcha nuevos mecanismos de censura, que legitiman las acciones que se cometen en contra de la libertad de expresión, de manera destacada, los juicios por daño moral.
Padgett indicó que de acuerdo a organismos defensores de periodistas, en este momento hay 25 periodistas en el país, incluyendo su caso, que están sujetos a procesos judiciales interpuestos por políticos, que toman acción legal en contra de los periodistas, porque estos han publicado algo que consideran daña su honor, y en virtud de que en el derecho civil no existe la debida preparación del juicio, un juzgador decide someter a proceso a un periodista en clara oposición a los convenios internacionales firmados por México en favor al derecho de la máxima publicidad al derecho de la información.
Expuso que cuando se asesina a un periodista, se le golpea, se le agrede, demanda, se le somete a una u otra medida de restricción, sea formal o informal, no se está dañando únicamente al periodista, porque de ser así, no serían sujetos los periodistas a un trato diferenciado, porque cuando los periodistas son sujetos de agresiones o persecuciones, además de dañar su integridad física y de la viabilidad laboral de ese periodista, lo que se daña es el derecho a la información de la sociedad.
“¿Qué es lo que hay detrás del asesinato de un periodista? ¿Qué es lo que quisieron hacer los que asesinaron a Javier Valdez en Sinaloa, a Miroslava Breach en Chihuahua, o Regina Martínez en Veracruz? ¿Qué es lo que querían? ¿Qué se acabara su vida? No, lo que ellos querían es que hubiese impunidad y nadie se atreviera a atentar contra el supuesto derecho que tienen los políticos y de sus pistoleros, para acallar a un periodista”.
Consideró que la impunidad suele ser decidida por una parte del poder político, pues a consecuencia de los tres asesinatos, hasta ahora solo algunos individuos son investigados, pero algunos de los beneficiarios de estos crímenes, en el caso de Chihuahua por ejemplo, son algunos políticos panistas.
Además denunció que a Javier Duarte no se le investiga por el asesinato de 14 periodistas en Veracruz cuando este político era gobernador, ya que se le investiga por otros delitos.
En el caso de Javier Valdez, expuso que se negó a declinar sobre sus investigaciones, siendo advertido y amenazado por los hijos de El Chapo Guzmán, quienes son los principales sospechosos de su crimen, pues las investigaciones del periodista apuntaban a que ex presidentes y ex funcionarios capitalinos tuvieron acceso a los mismos recursos económicos que dieron posibilidad a su asesinato, recursos que habrían parado en las campañas.
Además, señaló que ser periodista en México, es aspirar a un sueldo entre 7 mil 500 y 10 mil pesos mensuales, “queremos periodistas honestos, valientes, preparados, actualizados, pero al hacer coberturas en una presidencia, una secretaria de estado, éstos no deben pasar una línea”.
Padgett destacó que sí vale la pena hacer periodismo en México a pesar de los problemas, refiriendo el caso del libro que escribió denunciando hechos de pederastia donde estuvieron presuntamente involucrados el obispo emérito de Ecatepec, Onésimo Cepeda, con complacencia del ex gobernador Eruviel Ávila, libro por el cual fue demandado por ex mandatario mexiquense y donde ha enfrentado la maquinaria del poder del Edomex, situación de la que está convencido, la va a ganar, “es un esfuerzo que hago porque a final de cuentas, se tiene que probar que se le puede ganar a alguien así”.
“En el periodismo encontrarás la posibilidad de vivir muchos, muchos años más de los que viven las demás personas, podrás vivir a través de los demás y ver a través de sus ojos”.
Destacó que se debe hacer periodismo de calidad para las comunidades, ver las necesidades que tienen, haciendo periodismo local y de contacto, pues se acabó la era de las grandes redacciones en los periódicos y los periodistas ahora deben entender el mercado.