La industria restaurantera en Hidalgo registró un repunte de 35 por ciento en las ventas durante la reciente Semana Santa. Sin embargo, “en pesos y centavos, nada comparable con la Semana Santa del año anterior”, aseguró el representante del sector, Alan Vera Olivares.
Para el restaurantero las ventas este año en el primer período vacacional del año estuvieron un 100 por ciento más bajas que en 2018, evidenciando con ello “una debilidad económica que se refleja en todos los sectores.”
Afirma el presidente de la Cámara de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), que la caída en las ventas en el comercio y el sector restaurantero es el reflejo del estancamiento en que se encuentran variados sectores industriales, principalmente el de la construcción.
Un estancamiento derivado del mal inicio que se tuvo este año, “con el desabasto de gasolinas, las huelgas, los bloqueos, en fin, una serie de eventos que han afectado a los sectores productivos.”
Fenómenos que han impactado también en la confianza de los consumidores, a la baja, que limitan al máximo su consumo en espera de “a ver qué pasa”.
Esto origina que en la industria restaurantera los establecimientos estén trabajando por debajo de su capacidad, dada la baja en la demanda de los servicios.
Vera Olivares calculó que los restaurantes en Pachuca y las principales ciudades del estado están trabajando apenas a un 75 por ciento, promedio, de su capacidad instalada.
Pero además, recordó, es en los primeros tres meses del año cuando las empresas, incluidos los restaurantes, emprenden acciones para hacer crecer sus empresas, abrir sucursales, comprar más equipo o contratar personal, lo que hasta ahora no ha ocurrido.
“Los sectores productivos no contamos ya con los programas del Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem), que nos facilitaban el crecimiento.”
Sin financiamiento con tasas de interés blando, sin apoyos a emprendedores, capacitación y la asesoría necesaria para ser productivos, competitivos, “las empresas difícilmente nos sentimos con ánimos para arriesgar capitales.”
El empresario consideró que más allá de que el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, afirme que la economía en el país “va bien, requeté bien”, los empresarios enfrentan una desaceleración económica “que nos mantiene a todos expectantes.”
