Mole y pulque. Con lo mejor de su gastronomía y los más exóticos “curados” de pulque recibirán a miles de visitantes y turistas en el poblado de Tunitlán, municipio de Chilcuautla, este próximo fin de semana, en la Tercera Feria del Pulque.

Un evento que contará además con grandes atractivos como caminatas nocturnas con escenificación de leyendas tradicionales, carreras de caballos,  concursos gastronómico y pulquero, quema de fuegos pirotécnicos y bailes populares, entre otras actividades más.

Para invitar a disfrutar de su feria, estuvieron en la Secretaría de Turismo (Sectur-H), los organizadores de la misma Yuriel Álvarez, Epifanio Alvarez, Jesús Escamilla y Sandra Gutiérrez, esta última, directora de Turismo Municipal.

Las actividades de la feria, en esta, la comunidad más grande de Chilcuautla, iniciará a las 9:30 horas, con la  inauguración del evento, el cual reunirá a pulqueros de Hidalgo, Tlaxcala, Puebla y el Estado de México, que competirán con sus mejores preparaciones.

En tanto, cocineras tradicionales ofrecerán la rica gastronomía de la región, como son, entre otros, los moles verde, rojo y la barbacoa de carnero criollo, además de una extensa variedad de antojitos.

Se darán cita también, en este evento, artesanos de Hidalgo y estados vecinos, que ofrecerán lo mejor de su alfarería, tejidos y bordados, además de dulces típicos y regionales.

Los cuatro mil asistentes que se espera recibir en esta ocasión, podrán pernoctar en Chilcuautla y participar en la ya tradicional caminata nocturna, de entre hora y media y dos horas de recorrido, por los sitios de mayor interés en el poblado, como son, entre otros, el cerro de El Elefante y los restos de la hacienda Demiñhó.

 

Reconstruir la hacienda Demiñhó

En conferencia de prensa, los organizadores de esta feria aprovecharon la ocasión para hacer un llamado al gobierno estatal, a la Secretaría de Turismo, para que se les brinden apoyos que les permitan reconstruir la vieja hacienda Demiñhó, en Tunitlán.

Se trata de una muy antigua hacienda pulquera que fue destruida durante la revolución, cuya reconstrucción significarían empleos para los habitantes del poblado.

Trabajan los habitantes de Tunitlán por hacer del turismo una importante actividad, sustentada en recursos naturales como el cerro El Elefante, como esta antigua hacienda y en las aguas termales que existen en poblados vecinos, además, naturalmente, de su gastronomía.