Crece la Feria de Pachuca

La Feria de San Francisco, la “feria grande” de Pachuca, se ha convertido al paso del tiempo en una de las mejores ferias de México, y de continuar con la tendencia de este año, con la presentación en el Teatro del Pueblo de figuras como Steve Aoki, Juanes y Emmanuel, artistas de talla internacional, transita a competir por el primer lugar.

Una altura que llevará a nuestra feria a enfrentar enormes retos y, a cambio, convertirse en un negocio que beneficia al comercio tanto en el interior del recinto como en la zona periférica del mismo, y que podría impulsar fuertemente la actividad turística y comercial como lo hiciera en sus orígenes.

Han pasado casi 30 años desde que se construyeran las instalaciones de la feria en lo que entonces era un gigantesco predio: amplias, modernas, bien comunicadas tanto para los locales como para los visitantes que llegaban por la principal vía de acceso a la ciudad, la México-Pachuca.

Eran años de caballos, de deportes ecuestres, de exposiciones agrícola, ganadera, artesanal, además de un gigantesco palenque, área de juegos mecánicos, área comercial, Teatro del Pueblo y zona de restaurantes, a las que se sumó poco después un lienzo charro propio esta tradición en Hidalgo.

A un costado, como un coso vigilante, la Plaza de Toros Vicente Segura.

Llegó la feria cuando lo más cercano era la colonia Juan C. Doria, se encontraba abandonado el fraccionamiento Las Fuentes, en proyecto Casas Geo y Colonias.

Eran años, también, en que Pachuca y su Zona Metropolitana sumaban, si acaso, unos 250 mil habitantes, pero ya el gobernador Jesús Murillo Karam vaticinaba un acelerado crecimiento urbano.

Sin embargo, la feria comenzó a “quedar chica”; se vinieron tiempos difíciles; los artistas de “renombre” comenzaron a cobrar en dólares, la industria nacional de la música dejó de producir en masa grandes figuras y “los grandes” se volvieron exclusivos de palenque. La Feria de San Francisco, como casi la totalidad de las ferias patronales en México, incluida la famosa Feria de San Marcos, comenzó a decaer.

Sin embargo ha sido el Teatro del Pueblo, en los últimos años, el pilar que sostiene la Feria de San Pancho.

Y fue la presentación del DJ Steve Aoki, de origen estadounidense y japonés, lo que vino a convencer de la relevancia que puede recuperar esta feria cuando se invierte en ella.

Llegaron a Pachuca fans del músico procedentes del Estado de México, de la Ciudad de México, de Puebla, Tlaxcala, Veracruz, Morelos, Querétaro y hasta de sitios tan distantes como Jalisco, Coahuila, o Tamaulipas.

Dejó además otra lección: no hay que temer a las gigantescas concentraciones si se planean cuidadosamente las medidas de seguridad. Y la satisfacción de quienes por solo 45 pesos pudieron disfrutar de un espectáculo de calidad mundial.

Es de esperarse que una concentración igualmente grande se dé al cierre de la feria, con la presentación del cantautor Juanes, que al igual que Oaki ha pisado múltiples y grandes escenarios en el mundo.

Es evidente la interacción que puede fortalecerse entre la feria de Pachuca –y eventos similares en el país-, y los artistas de gran fama, cuyas multitudinarias presentaciones han venido también a la baja.

Y con ello, la Feria de Pachuca no sólo recobrará su esplendor, sino hará rentable la ampliación de sus instalaciones, promoverá el hospedaje y el turismo en general, y beneficiará a millares de comerciantes que instalan sus negocios tanto al interior del recinto ferial como en la periferia del mismo.

“¡Que se repita, que se repita!”, es clamor general.

dolores.michel@gmail.com