Operadores de unidades del transporte público pidieron el apoyo del Gobierno del Estado ante las bajas ganancias que han tenido por la contingencia sanitaria y que se ve agravada por la disposición oficial de operar al 50 por ciento de su capacidad.
Con una manifestación realizada el viernes por la mañana, los choferes de distintas rutas de la capital del estado y Mineral de la Reforma señalaron que no están en contra de las medidas sanitarias que se implementen para evitar la propagación del COVD-19, no obstante con la reducción de pasajeros, se ve afectada su economía familiar.
De acuerdo con Alejandro Amador, vocero de los transportistas, este impedimento legal para urvan y taxis de la zona metropolitana, origina que sus ganancias sean de apenas el diez por ciento.
Por lo anterior comentaron que el pasado jueves acudieron a las oficinas de la Secretaría de Movilidad y Transporte del Estado donde fueron atendidos por el Director General Alejandro Javier Aquino quien señalaron, los trató “de una manera muy déspota y prepotente”.
Solicitaron que se considere un apoyo para el sector durante esta contingencia pues son quienes no pueden parar actividades y desde el principio han adoptado las medidas de sanidad que recomiendan las autoridades de salud “nosotros las respetamos pero al final de nuestra jornada laboral nos queda nada de dinero”.
Alejandro Amador señaló que las rutas trabajan con la mitad de sus unidades pues la baja afluencia de personas les había reducido el trabajo, no obstante con esta medida implementada por el gobierno del estado desde el pasado jueves, ha orillado a que su salario sea de 50 pesos por día.
“Las combis son para 16 personas, solo podemos subir a ocho por media vuelta, al día ganamos 600 pesos pero 550 son para gastos de gasolina, comprar cubreboca y gel… nos quedan 50 pesos para mantener a nuestras familias” expresó el vocero de los transportistas.
