Ya son ocho universidades Benito Juárez las que se encuentran instaladas en el estado de Hidalgo, informó el delegado federal de programas del Bienestar del Gobierno de México, Abraham Mendoza Zenteno, pues se abrieron cinco nuevas este año en Ajacuba, Jacala, Yahualica, San Felipe Orizatlán y Tlanchinol, las cuales arrancaron ya sus actividades con alumnos inscritos.

Indicó que todos los alumnos del Sistema de Universidades del Bienestar Benito Juárez cuentan con la beca que lleva el mismo nombre, mediante la cual reciben una mensualidad de 2 mil 400 pesos, con los que pueden ayudarse a mantener sus estudios.

Recordó que hay becas por familia a estudiantes de nivel primaria, secundaria y preparatoria, y las becas Benito Juárez de nivel superior, donde ya es una beca individual a todos los estudiantes de escuelas públicas, “ahí es para todos”.

Explicó que la incorporación a este programa se realiza a través de la matrícula escolar que informa las direcciones de cada escuela. Reconoció que en este tema, a veces hay reclamos, pero se deben a mala captura del nombre de los estudiantes en el sistema, que pueden fallar por una letra mal capturada desde la escuela al programa, “luego se los demostramos y ya, se calman”.

Reveló que hay becas de educación superior en varias modalidades, pero la más importante es la de Jóvenes escribiendo el futuro, que es de 2 mil 400 pesos mensuales, donde es de manera individual el registro y la solicitud, “son jóvenes de más de 18 años, entran a la plataforma y les piden varios documentos que tienen que escanear y enviar a esa plataforma”.

Explicó que se trata de jóvenes en zonas de alta marginación o que son de pueblos originarios, hay mucha más posibilidad de que reciban estas becas.

Detalló que en el caso de los alumnos que están en las Universidades del Bienestar Benito Juárez, todos los estudiantes tienen beca.

Precisamente, recordó que el año pasado, con estas universidades se iniciaron con tres: Huasca, Chilcuautla y Francisco I. Madero.

“Para este año se abrió la plataforma para la inscripción a cinco nuevas sedes. Tenemos ocho universidades Benito Juárez en Hidalgo, con cinco carreras. En tres tenemos Ingeniería Agroalimentaria, que es Chilcuautla, Huasca y Yahualica. Las tres ya tienen alumnos, unas más otras menos, y las que ya estaban reinician el año escolar y las que son nuevas, por ejemplo, la de Yahualica, pues acaba de iniciar sus actividades este lunes, pero ya tienen estudiantes”.

Mendoza indicó que la carrera de Docencia e Investigación del Patrimonio Histórico y Cultural está en Francisco I. Madero y en Jacala; mientras la carrera de Ingeniería Agroforestal se imparte en Tlanchinol, la carrera de Medicina y Salud Comunitaria en San Felipe Orizatlán, y en el municipio de Ajacuba, en la localidad de Tecomatlán, se imparte la carrera de Enfermería y Obstetricia.

“Tenemos de momento esas ocho universidades, pero si hay un joven de Hidalgo, que no le convence ninguna de estas carreras, puede entrar a cualquier otra parte del país a estudiar ingeniería civil, derecho, administración, contabilidad, ingeniero petrolero, ingeniero en tecnología del agua, que hay por varias partes del país”.

Expuso que en Texcoco hay ingeniería civil, en la Ciudad de México hay escuela de medicina, derecho, contabilidad, administración, por lo cual para ingresar a las universidades Benito Juárez se debe tener la preparatoria terminada, hacer una carta de motivos pues no hay examen de admisión, “y decir: yo quiero”.

Mendoza Zenteno manifestó que al ingresar y matricularse, estos alumnos validan su registro que hicieron de manera virtual, entregando los documentos en físico, entregan su carta de motivos e inician el curso escolar con un curso denominado de recuperación de conocimientos, donde la gran mayoría de los jóvenes se quedan, algunos abandonan por falta de interés mas no por falta de oportunidad ni tampoco por un examen de admisión que les limite la posibilidad de estudiar por falta de cupo, “al momento de convertirse en estudiantes, empieza a recibir la beca Benito Juárez o Jóvenes Escribiendo el Futuro, con 2 mil 400 mensuales, para que se acerquen al plantel, ya sea rentando un sitio o bien que alguna familia los hospede”.

Indicó que se parte de que los jóvenes se desarrollen en un ambiente familiar, pues actualmente existe una mayor vulnerabilidad, e incluso refirió que hay casos de intercambio entre comunidades entre las familias, “la izquierda no debió haber abandonado el tema de la familia, también debe atender y fomentar los valores familiares pues ahí se adquieren los primeros valores y principios, pues la familia es el núcleo básico de la sociedad”.