Georgina Obregón

Tengo una especie de fobia a manejar. En una ocasión adquirí un automóvil, pero un ligero percance me obligó a regresar al transporte público. Generalmente viajo en taxi, sobre todo de noche.

Este 14 de junio me enteré que el gobernador Omar Fayad puso en práctica el programa Taxi Contigo, que tiene a su cargo la Secretaría de Movilidad y Transporte (Semot). Se trata de un plan de modernización del servicio público individual, por medio una nueva imagen cromática y la inclusión de una aplicación para teléfonos móviles, geolocalización, taxímetro y botón de pánico.

De entrada en 21 municipios se aplicará este servicio. Se trata de Pachuca, Mineral de la Reforma, Tulancingo, Tula de Allende, Tepeji del Río, Tizayuca, Actopan, Huichapan, Mixquiahuala, Progreso de Obregón, Tecozautla, Santiago Tulantepec, Atotonilco de Tula, Huejutla, Ixmiquilpan, Tezontepec de Aldama, Tepeapulco, Apan, Tlahuelilpan, Cuautepec y Atitalaquia.

Ahora sí que habrá taxis para cada ocasión y tamaño del presupuesto, porque el servicio se divide en básico, plus, premium y preferente, por lo que para las personas que tomen una unidad en la calle, el costo será el mismo que en la actualidad, pero si la solicitud se realiza a través de la aplicación móvil la tarifa será más alta.

Con la aplicación de la APP para solicitar taxi a domicilio se garantizan varias cosas, entre ellas que los concesionarios y conductores sean los mismos de siempre, pero con un nivel de servicio superior. Es decir, que cuenten con unidades en buen estado, que los conductores sean amables y estén presentables, que no lleven el radio a todo volumen con la guaracha sabrosona y que al hacer por escrito la solicitud no haya lugar a equivocaciones y discusiones.

De esta forma se impide la entrada del monopolio de las Uber, pero se brinda el servicio con mayor responsabilidad, seguridad, limpieza y atención que requiere la gene y que ha tenido preferencia por el servicio a través de las plataformas digitales.

Hay que considerar que desde 2013 que llegó a México la primera empresa de servicios de transporte privado hasta la fecha, la competencia entre taxistas convencionales y choferes particulares, no ha sido igualitaria.

Anteriormente los taxistas competían bajo las mismas condiciones, todos los choferes debían cumplir con los mismos requisitos y cubrir las mismas cuotas según el estado en donde ejercieran.

Esta situación ha venido cambiando desde la llegada de los servicios de transporte mediante plataformas digitales.

En la actualidad están presentes en México diversas empresas, en su mayoría extranjeras, entre las que destacan UBER, Didi, Easy Taxi, Yaxi, Taxibeat y Cabify, a las cuales no se les imponen los mismos requerimientos que a los taxistas.

Un ejemplo de ello es la licencia para conducir Tipo B que se requiere para ser taxista más no para ser socio-conductor, denominación que se hace al chofer del servicio de transporte por medio de plataforma.

Que de socio-conductores sólo tienen el nombre, pues un chofer no es precisamente socio a menos que sea el dueño del vehículo y entonces sí podría disfrutar de otros beneficios y obtener mejores ganancias.

Se añade a ello los gastos extra que el taxista debe cubrir como: el seguro del auto, el pago del reemplacamiento, el engomado y la rotulación del vehículo.

Además, cabe resaltar, que se ha ejercido una presión legal por parte de estas empresas hacia el Estado para que se les permita operar.

Situación que ha puesto en peligro la desaparición del servicio de taxis por la preferencia de los ciudadanos hacia los servicios que solicitan mediante plataformas

Tal como ha venido sucediendo en la Ciudad de México donde circulan más de 100 mil taxis y ahora tienen que competir contra la misma cantidad de vehículos o más que pertenecen al servicio privado.

La plataforma líder en servicios de transporte continúa con un crecimiento exponencial, abarcando actualmente el 80 por ciento del mercado mexicano con presencia en 41 ciudades del país.

Una de las principales razones por las cuales las personas prefieren el transporte privado, es por la seguridad que perciben mediante la imagen del vehículo, el chofer y la aplicación.

Sin embargo, en el 2018 se reportaron más de 400 denuncias por violaciones, robos, secuestros, hasta homicidios y feminicidios encabezados por choferes de estas plataformas.

Y a través de redes sociales se han mostrado publicaciones de diversos usuarios ofreciendo cuentas falsas para socio-conductores o les ofrecen también la opción de desbloquear sus cuentas o alterar sus calificaciones.

Acciones que demuestran a los usuarios que la percepción que se tiene de un servicio mejor y con mayores beneficios es sólo aparente.

Pero no se trata sólo de las deficiencias de dichos servicios, las consecuencias impactan de manera negativa en cuestiones laborales para los taxistas a nivel nacional.

Por eso considero que hay que recibir con beneplácito la modernización del transporte público y brindarle el beneficio de a duda a este servicio, conocer el sistema para reportar anomalías.

Yo espero que a modernización de los taxis considere un mejor, seguro y ágil servicio en todos sus aspectos y que el uso del botón de pánico únicamente se llegue a utilizar por una amenaza proveniente del exterior de la unidad y no el interior.
Georginaobregon433@mail.com; T: @Georobregon
nte en parte del año 2019 y 2020.