Vías intransitables, encharcamientos y peatones varados fue el resultado de las intensas lluvias registradas la tarde del miércoles en la capital hidalguense, y municipios aledaños.
Los primeros estragos de las lluvias, se registraron en el municipio de Mineral de la Reforma, donde las calles de fraccionamientos como La Providencia y San Luis II presentaron acumulación de agua; mientras que el camino de Colinas de la Plata hacia El Saucillo quedó intransitable.
En Pachuca, la zona centro fue la principal afectada, con encharcamientos en vialidades como Benito Juárez, Vicente Guerrero y Felipe Ángeles, donde los vehículos circulaban con precaución ante la presencia de agua.
Asimismo, el sistema de transporte Tuzobús anunció el cierre de la estación Centro Histórico debido a las intensas lluvias; además, ante la falta de transporte público, algunos peatones quedaron varados entre los encharcamientos, siendo el personal de Protección Civil quienes los auxiliaron.
En respuesta, elementos de la Comisión de Agua y Alcantarillado del Sistema Intermunicipal (Caasim) llevó a cabo trabajos de limpieza, desazolve y desalojo de agua pluvial en los fraccionamientos Tuzos, Villa San Cristóbal y San Alfonso.
Mientras que, en Tizayuca la alcaldesa Susana Ángeles Quezada giró instrucciones a la Dirección de Protección Civil y Bomberos y a la Secretaría de Seguridad Pública, Transito y Vialidad para activar el “Programa Especial de Protección Civil para temporada de lluvias 2020-2024”; para atender a más de 130 familias del fraccionamiento El Recinto, donde el agua ingresó a las viviendas.
Además, se brindó apoyo de limpieza, desazolve y bombeo de coladeras, traslado a personas a sus hogares en los fraccionamientos Rancho Don Antonio y Haciendas de Tizayuca; y se mantiene el monitoreo del crecimiento del agua del Río Papalote y la presa El Manantial.
Cabe destacar que la Subsecretaría de Protección Civil y Gestión de Riesgo de Hidalgo informó sobre la presencia de un temporal de lluvias, el cual se prevé que termine el próximo 11 de julio, provocando la caída de lluvias muy fuertes, así como granizadas, actividad eléctrica en condición de tormenta, aceleración de los vientos con rachas iguales o superiores a los 50 kilómetros por hora y ambiente templado.