Raúl García Gutiérrez
Y llegaron las vacaciones, deseadas y esperadas por alumnos, docentes y padres
de familia. Es el período de verano cuando los alumnos tienen el receso más largo
de descanso, al finalizar un ciclo escolar e iniciar uno nuevo.
Después de poco más de 20 semanas de descenso en los contagios ocasionados
por el virus SARS-CoV-2 en nuestro país, se esperaba que este tiempo pasara
con una relativa tranquilidad, pero el aumento explosivo que se está dando de
nuevos contagios prende los focos amarillos a nivel nacional. El mito de la Tercera
Ola es ahora una realidad.
El contagio se está dando principalmente entre la población no vacunada, menor
de 50 años. Afortunadamente, de acuerdo con el Dr. Hugo López-Gatell, la tercera
ola transcurre con una reducción de más del 75% de las hospitalizaciones y
defunciones.
La propuesta del Presidente López Obrador, de regresar a las aulas el 30 de
agosto, se antoja difícil de llevar a cabo. Después de un poco más de dos años y
medio en el poder, Andrés Manuel ha demostrado ser un estratega muy fino, que
anticipa la agenda nacional. Al momento de escribir esta columna, aún no se
conoce el plan de regreso a clases que anunció la semana pasada.
Existe una desconfianza muy grande entre los paterfamilias por el hecho de
mandar a los niños a las escuelas sin estar vacunados. La SEP sostiene que el
regreso será voluntario. Con el personal educativo vacunado, la estrategia
nacional de vacunación se está acelerando, de tal forma que para agosto, un
porcentaje muy alto de la población que falta por vacunar tenga por lo menos la
primera dosis.
Y mientras muchas familias ya andan gozando de la vida “normal” en playas y
centros turísticos, las vacunas siguen llegando prácticamente a diario al país, la
Secretaría de Salud trabaja intensamente en la logística para la designación y
operación de los centros de vacunación y el Ejército, la Marina y la Guardia
Nacional se encargan de la distribución estratégica a todo el territorio nacional.
Eso sí, mientras no nos contagiemos ni le pase nada a los nuestros, todo está
bien. Pero si me contagio, “la culpa la tiene el gobierno”, “las vacunas no sirven”,
“Gatell es un mentiroso”, “ya se les perdieron las vacunas”, “¿cuándo me va a
tocar la vacuna?” y muchas otras mentiras y verdades a medias, difundidas
principalmente por la absurda e incongruente oposición que tenemos en México.
Este tercer repunte de contagios amenaza con ser más intenso que los dos
anteriores. No podemos ni debemos bajar la guardia. En los estados con semáforo
verde, tal parece que la pandemia terminó y se puede retomar nuestra vida de
antaño.
Hidalgo estuvo alrededor de seis semanas en semáforo verde. Recién la semana
pasada bajamos a amarillo por el alto número de contagios que se ha presentado.
Pero ya nada cambió. La gente sigue en la calle, en las plazas, en las zonas
comerciales y de esparcimiento.
Incluso se instaló un módulo de vacunación ambulante en Plaza Juárez, a fin de
que, sin importar el domicilio, las personas que faltan de vacunarse pudieran
hacerlo. Todo con el objetivo principal de acelerar la vacunación en la ciudad
capital.
Disfrutemos las vacaciones pero no bajemos la guardia. Todavía llevará un tiempo
antes de que se controle por completo al virus. Estemos atentos a las indicaciones
del sector salud. Sigamos practicando las medidas sanitarias de prevención:
lavado de manos frecuente, uso de gel antibacterial, no acudir a reuniones
masivas, el uso correcto del cubrebocas.
Cuídate, cuida a los tuyos. Insisto, tú y yo somos el factor principal para detener la
pandemia. ¿Quieres colaborar conmigo?
Con gusto los leo. Envíame un correo o un mensaje en mi red social, los espero.
Email: raugargut@gmail.com
Twitter: @tuzo_raul