Con un llamado respetuoso a maestros, directivos y autoridades educativas estatales, el Presidente López Obrador convocó a un regreso total a las clases presenciales.
Nuestro estado se encuentra entre los pocos que no ha regresado al cien por ciento a las aulas. El pasado lunes se incorporaron 12 municipios más a las actividades educativas en los planteles, sumando 54 ayuntamientos al ansiado regreso.
Las demarcaciones al sur del estado son las que mantienen la suspensión, debido a que, desde el inicio de la pandemia, han tenido los índices más altos en contagios y las lamentables defunciones.
Pachuca, Mineral de la Reforma, Tizayuca y Tulancingo, cuatro de las alcaldías más afectadas continúan con las puertas cerradas en sus planteles educativos. Y la polémica es importante entre los padres de familia: ¿regresar o no regresar?
A pesar de que la Secretaría de Salud federal ha informado que los menores de edad no requieren la vacuna, a menos que sufran alguna comorbilidad, un buen número de paterfamilias insiste en que todos debemos estar vacunados para el regreso.
A partir del 1 de octubre se abrió el registro para los menores de 12 a 17 años con comorbilidades, así como para adolescentes embarazadas. Con el personal educativo vacunado, el regreso a clases se percibe muy próximo.
Hay un punto importante, al cual considero, no se le ha dado la necesaria difusión: la protección del personal educativo más vulnerable. A pesar de estar vacunados, existen muchos directivos, docentes y personal de apoyo, ya sea de avanzada edad o con un estado de salud endeble.
La SEP no ha emitido lineamientos claros para cuidar de este personal. Se han mencionado, de manera informal, la aplicación de horarios recortados y la asistencia en días alternados, pero nada oficial.
Pero, regresando al llamado que hizo el Presidente en la conferencia matutina del 10 de noviembre, al parecer, el regreso a las aulas se dará antes de fin de año. Estaremos al pendiente del posible anuncio, a cargo del Gobernador, el Secretario de Salud y el de Educación en los próximos días.
Para evitar los indeseables contagios, es importante que todos seamos responsables, continuando con las medidas sanitarias implementadas desde marzo de 2020, cuando inició la contingencia.
Lavado de manos frecuente, uso correcto de la mascarilla facial – cubriendo boca y nariz –, gel antibacterial con 70% de alcohol y distancia mínima de 1.5 metros con las personas a nuestro alrededor nos aseguran una probabilidad muy remota de contagiarnos de Covid-19.
Las escuelas se encargarán de los filtros sanitarios a la entrada, en los salones y durante los recesos, pero la revisión más importante de todas será en casa. Si de forma irresponsable o porque no quieren quedarse con los hijos en casa, los envían a la escuela enfermos o con algún síntoma sospechoso, estarán propiciando eso que tanto reclaman, un foco de infección en la comunidad educativa.
Si así lo decide la autoridad correspondiente, que sea un regreso seguro, feliz y muy productivo para todos, alumnos, maestros y padres de familia. La corresponsabilidad es extremadamente importante para lograrlo. ¿Contamos con su participación?
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