Por Georgina Obregón
Desde que arrancó la campaña para elegir gobernador en el estado de Hidalgo, el 3 de abril de este año, personajes de la administración pública federal, del Senado de la República y de la Cámara de Diputados, con filiación a la Cuarta Transformación, y de estados regidos por Morena, han pisado territorio hidalguense para apoyar, en su momento, la candidatura del entonces aspirante de Juntos Hacemos Historia, Julio Menchaca, y posteriormente y a unos días de rendir protesta a la Jefatura del Ejecutivo local siguen llegando a la entidad.
Durante el proceso de proselitismo diversos servidores públicos y representantes de las cámaras Alta y Baja acompañaron a Menchaca en actos específicos con la intención de arroparlo y atraer así a liderazgos locales y electores todavía no convencidos por quién sufragar o dubitativos entre votar por el partido de siempre o sumarse a la otra opción que representaba Menchaca, quien finalmente triunfó en las urnas con más de 60 por ciento de la votación.
Ahora que la administración pública estatal se encuentra en etapa de entrega – recepción, la oficina de atención de Menchaca Salazar cada determinado tiempo abre sus puertas a las visitas, quienes además de venir a saludar planean junto con el gobernador electo soluciones a temas que requieren de la participación de varias instancias. Aunque se trata de reuniones de amigos, en éstas se comentan asuntos que requieren de la voluntad política de las partes involucradas para dar resultados.
En el mes de julio estuvo en Pachuca la Jefe de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheimbaum, quien comió en un restaurante, cuya especialidad es el jabalí, en compañía de Menchaca. La política morenista se anotó para la agenda común un tema pendiente entre las dos demarcaciones: el agua.
A raíz de la inundación que afectó a la región de Tula en 2022 y que fue provocada por descargas residuales del Túnel Emisor Oriente, urge que a dicho asunto se le encuentre una pronta solución entre las entidades que comparten ese problema y que Hidalgo deje de ser receptor de las aguas negras que genera la capital del país.
Además de Shembaum, en los últimos días han visitado el estado y sostenido reuniones con el próximo gobernador constitucional Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación; Marcelo Ebrard, Canciller de México y Ricardo Monreal, senador de la República.
Inclusive acudió a la Casa de Gestión de Julio Menchaca el embajador de Estados Unidos en el país, Ken Salazar.
Si bien esta situación rompe con la costumbre de que los políticos estatales tenían que ir a la capital del país para tratar asuntos con integrantes del gobierno federal, el Senado o la Cámara de Diputados, ahora los papeles se han invertido y es de esperarse que el futuro gobernador del estado aprovechará la expectativa que se ha generado por Hidalgo a favor del desarrollo de la entidad y de toda su población.
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