La calle de Vicente Guerrero, en el centro pachuqueño, fue visitada este sábado por decenas de personas en busca de uniformes, blusas, zapatos, tenis, mochilas, lentes, cuadernos, diademas y diversos adornos para el pelo, agujetas, fruta y carnes frías para retornar a las clases presenciales tras casi dos años de educación a distancia o presencial a ratos.
Desde las 10:00 horas, cuando por lo general comienza la actividad en dicha arteria comercial, hicieron acto de presencia padres y madres en busca de los artículos más adecuados para el regreso a clases, especialmente en materia de calzado pues las zapaterías lucieron repletas, ya que las familias entraban y salían de unas y otras buscando el mejor precio, la marca preferida o alguna oferta.
En recorrido de Síntesis Hidalgo se observó que las tiendas Milano, Gualdos y otras que ofertan uniformes, útiles y mochilas, registraron gran presencia de presuntos compradores quienes preguntaban por los precios de uniformes, blusas, camisas, calcetines y calcetas, principalmente.
Las tiendas de ropa también recibieron gran afluencia de personas que solicitaban botones, hilos, cortes de telas de colores gris, banco y azul para elaborar en casa los uniformes. En dichos establecimientos también demandaron tijeras escolares, loncheras y cajas de madera, entre otros artículos.
Al interior del mercado Barreteros, que se ubica en la citada calle de Guerrero, disminuyeron los clientes de barbacoa de quesadillas, sopes y tacos de barbacoa, pero se incrementó la venta de carnes frías, pollo, bisteces y frutas.
Al preguntarle a la señora Martha cómo iban las ventas este sábado en su puesto de frutas y verduras, contundentes afirmó: Gracias a Dios que regresan a clases, porque toda esta semana la venta estuvo muerta.
En cambio, un matrimonio que se dedica a la venta de pollo dijo que los días han sido buenos, pero de todos este 27 de agosto lo calificaron como el mejor de la semana.
Poco pero va saliendo, comentó por su parte el propietario de una carnicera que tenía listas las bolsas chicharrón en espera que llegaran los clientes habituales.