Por Parly Roque
Durante los últimos días se han vivido hechos históricos, tanto nacionales como internacionales. El primero fue la propuesta de reforma sobre la Guardia Nacional, tema bastante polémico por el origen y contenido de dicha reforma; el segundo es la muerte de la Reina Isabel II, lo cual enterneció a todo el mundo, pues luego de más de 90 años de edad y alrededor de 70 años de reinado, se escuchó la frase “El puente de Londres ha caído” la cual anunciaba la muerte de la reina y el inicio de los eventos programados y planeados al morir, los cuales duran alrededor de 9 días, como lo mencioné es un hecho que quedará grabado en la historia, sigamos al pendiente de lo que sucede alrededor de este hecho con el respeto merecido.
Ahora bien, en temas más nacionales, como lo mencionaba al comienzo de estas líneas, un hecho que indudablemente se podría convertir en algo histórico es el relacionado con la reforma de la Guardia Nacional, debemos de entender que esta iniciativa se encuentra dividida en dos; la primera, propuesta por el presidente y que ya ha sido aprobada en la Cámara Alta en las primeras horas del día viernes, es donde la Guardia Nacional en lo operativo y administrativo pasa a manos de la SEDENA, algo que evidentemente es anticonstitucional; sin embargo, en la desesperación por lograr conseguir el control de la seguridad y una estrategia fallida de seguridad ha originado esta situación que, por otro lado, también podría ser un parteaguas para la militarización del país, y con ello poco a poco preparar un terreno para alguna acción futura. La otra parte de la reforma y desde mi punto de vista la más política, es la presentada por una diputada del PRI, la cual extiende el periodo de 5 años a 9 años, la facultad del presidente para disponer de las fuerzas armadas para tareas de seguridad, al ser una reforma que conviene al Ejecutivo federal, causa mucha curiosidad que quien la apoye y proponga sean los mismos integrantes del PRI, lo cual incluso ha puesto en peligro la coalición Va por México, la cual hasta hace unos días se podría decir era un bloque opositor unido, sin embargo, a todos nos causó sorpresa, pues cada uno de los partidos integrantes dieron su opinión respecto al tema, pero en un movimiento bastante cuestionable, el presidente del tricolor, Alejandro Moreno, comentó que “el PRI no recibe ultimátum, ni de opositores ni de aliados”, ante la evidente molestia del PAN y PRD al no ser tomados en cuenta, ellos expresaron que la coalición por lo menos con el PRI, podría estar en peligro pues se sintieron traicionados y, además, pidieron a los diputados del PRI que bajaran la iniciativa o votaran en contra, pero dudo que Alito haga caso a esto. La conclusión de ello se verá en próximos días: ¿podríamos ver el fin de la coalición Va por México? Estemos pendientes de lo que sucede, pues esta situación puede tener repercusiones para las elecciones del 2023 y 2024.
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